Los secretos para hacer el mejor café

Nos encanta el café, nos declaramos totalmente adictos a esta versátil bebida que se puede tomar de mil formas y en prácticamente cualquier momento del día. Sin embargo, no siempre sabemos preaprarlo bien y, en muchos casos, cometemos errores que arruinan el café en cuestión de segundos. Otras veces nos da un ataque de creatividad y lo maltratamos vilmente con creaciones cuquis o sirviéndolo en sitios que no se debe, como una cáscara de aguacate.

Es cierto de que en nuesto país, a pesar de ser grandes consumidores de esta bebida, nos falta cultura cafetera. Te damos unas pinceladas para elegir la variedad de café y el tipo de preparación perfectos para cada momento del día. Te desvelamos los secretos de un buen café.

Un café para el desayuno

La mezcla de café arábica y café robusta es la combinación perfecta para el desayuno. El segundo es dos veces más concentrado en cafeína que el primero.

Con una cafetera de filtro normal, manual o eléctrica, obtendrás de forma rápida un buen café. Para conseguir mejores resultados, humidifica el filtro antes de verter el café. Pon una cucharada sopera por taza y añade el agua a punto de hervir.

Decídete por un café 100% arábica, todo un concentrado de aromas. Y si te gusta la espuma untuosa que de forma tradicional cubre el café solo, puedes añadir café robusta.

Prepáralo con una máquina de expreso, eléctrica o italiana y elige una molienda muy fina que permita que con cualquiera de estos métodos se capten todos los aromas.

El café puede servir para espabilarte o para ser disfrutado con todos los sentidos. La calidad del grano de café es esencial y algunos grandes cafés arábica de aroma suave son maravillosos.

Para respetar el aroma, es mejor usar siempre café natural y molerlo en el último minuto. Una cafetera de émbolo sacará lo mejor de su sabor, pero si tienes una cafetera de vacío, tipo Cona, sabrás que produce un café puro y rico en sabores y aromas ¡utilízala! Y si eres amante del café y no tienes una, hazte con ella, ¡te vas a sorprender!

En función de la cafetera que vayas a utilizar necesitarás un tipo de molienda específico. Si no mueles el café en casa, acude a un sitio especializado donde te muelan el café en función de tu cafetera o, si lo compras en el supermercado, fíjate que grosor de molienda tiene el café que te vayas a llevar casa. ¡Es muy importante para preparar un buen café en casa!

- Pulverizado. Esta molienda extrafina sólo sirve para hacer café turco. El café se mezcla directamente con el agua en ebullición.

- Muy fino. Indispensable para las máquinas que hacen esos deliciosos cafés expresso.

- Molienda fina. Es el grosor perfecto para las cafeteras de filtro. Permite que se liberen todos los aromas mientras va cayendo el agua.

- Media. Es la que mejor se adapta a las cafeteras de émbolo. Exige un contacto prolongado con el agua para que el aroma pueda apreciarse bien.