6 platos típicos que tienes que probar si alguna vez vas a México
Nachos, tacos, enchiladas, fajitas, guacamole… ¿se te hace la boca agua? Estas son las mejores recetas mexicanas.
México ha sido durante mucho tiempo uno de los destinos vacacionales más populares de todo el mundo, atrayendo tanto a los amantes del sol como a los amantes de la comida. Si tienes la suerte de estar planeando un viaje a este país, asegúrate de ir con tiempo de sobra para probar los mejores sabores que el país tiene para ofrecer. ¡Sus recetas son únicas!
La gastronomía mexicana es de tal relevancia -e importancia- que está considerada desde el año 2010 como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO. Nachos, tacos, enchiladas, fajitas, guacamole… y sobre todo, los platos picantes son la joya de la corona de una cocina en la que están muy presentes los vegetales, las salsas y las especias, y que está directamente influenciada por otras, entre las que se encuentra, por supuesto, la española. ¿Algunos de sus platos más elaborados y especiales? El pozole blanco, una sopa hecha a base de un tipo de maíz llamado cacahuazintle con carne de cerdo o pollo, o el elote, una mazorca de maíz cocida que se come como si de un helado se tratase, aderezada con sal, chilli, lima, crema agria, queso y mayonesa.
¿Tienes pensado visitar México más pronto que tarde? Te contamos cuáles son los seis platos más típicos del país latino, que podrás tomar y degustar en restaurantes, mercados y puestos callejeros mientras estás allí. ¡Toma nota y no te olvides de ninguno de ellos! Tu paladar no volverá a ser el mismo después de tu visita.

iStock
Elote
Encontrarás a alguien vendiendo elote, el nombre mexicano de mazorca, en casi todas las esquinas de las calles de México. El maíz se hierve tradicionalmente y se sirve en un palito (para comer como un helado) o en tazas, habiendo cortado los granos de la mazorca. Luego se agrega en abundancia sal, chile en polvo, lima, mantequilla, queso, mayonesa y crema agria.

iStock
Enchiladas
Las enchiladas se remontan a la época maya, cuando la gente del Valle de México comía tortillas de maíz envueltas en pequeños peces. Hoy en día para preparar enchildas se utilizan tortillas de maíz y harina y se rellenan con carne, queso, mariscos, frijoles, verduras o todo lo anterior. Luego, las tortillas rellenas se cubren con una salsa de chile, lo que lo convierte en un desayuno mexicano perfecto.

iStock
Pozole
Según los antropólogos, esta sopa prehispánica alguna vez se utilizó como parte de los sacrificios rituales. Hoy en día en México se consumen versiones de pozole de pollo, cerdo y vegetariano en los entornos más cotidianos. Hecho de maíz molido con muchas hierbas y especias, el plato se cuece tradicionalmente durante horas, a menudo durante la noche. Una vez que esté listo para servir, se espolvorea lechuga, rábano, cebolla, lima y chile por encima.

iStock
Guacamole
El guacamole es sin duda uno de los platos más populares de México, pero pocas personas saben que esta salsa tradicional se remonta a la época de los aztecas. El guacamole, hecho con puré de aguacates, cebollas, tomates, jugo de limón y pimientos picantes (y, a veces, uno o dos dientes de ajo), se suele comer con nachos o como guarnición.

iStock
Mole
Tres estados afirman ser el hogar original del mole (pronunciado "mol-eh"), una rica salsa popular en la cocina mexicana. Existen innumerables tipos de mole, pero todos contienen alrededor de 20 ingredientes, incluidas una o más variedades de chiles. Quizás el mole más conocido es el mole poblano, una salsa roja oxidada que se sirve típicamente sobre pavo o pollo.

iStock
Chilaquiles
Este popular plato de desayuno presenta tortillas de maíz ligeramente fritas cortadas en cuartos y cubiertas con salsa verde o roja (la roja es un poco más picante). Por lo general, se agregan huevos revueltos o fritos y pollo desmenuzado, así como queso y crema. Los chilaquiles a menudo se sirven con una dosis saludable de frijoles (frijoles refritos).