Una escapada a Turín
48 horas en Turín dan para mucho. La Sábana Santa, la fábrica de Fiat y la Juve, su equipo de fútbol, son los iconos de esta ciudad italiana que tiene además un intensa vida artística y cultural. Cafés,...
48 horas en Turín dan para mucho. La Sábana Santa, la fábrica de Fiat y la Juve, su equipo de fútbol, son los iconos de esta ciudad italiana que tiene además un intensa vida artística y cultural. Cafés, chocolaterías, arquitectura de vanguardia y rincones únicos completan la propuesta. ¿Te apuntas?
El chocolate es algo imprescindible en la vida diaria de un turinés. Para sumergirse en el alma de la ciudad, lo primero es respetar las tradiciones y comenzar el día degustando un clásico bicerin caliente (chocolate con café y nata), que sirven en Al Bicerin, una añeja confitería situada en la Piazza de la Consolata, frente a la iglesia del mismo nombre. El gusto por esta delicia viene de antiguo, y prueba de ello son las numerosas confiterías, bombonerías y chocolaterías artesanales que encontramos.
Incluso se celebra una conocida feria temática (Cioccolata Tó) en febrero, que dura tres semanas: se hacen talleres y esculturas, se proyectan películas relacionadas con el cacao y los restaurantes realizan menús especiales. Se puede adquirir en las oficinas de turismo el Chocopass (12 €, diez degustaciones, para dos días).
Desde la Piazza de la Consolata se puede tomar la concurrida Via Garibaldi hasta la Piazza Castello, un gran cuadrilátero barroco creado con el fin de establecer la sede del poder dinástico de los Saboya. Destaca sobre todas las edificaciones el Palazzo Madama, en parte medieval y en parte barroco, que en el siglo XVII adoptó este nombre por ser la residencia de la madama reale Maria Cristina, viuda de Amadeo I. Es posible visitar sus dependencias personales y una interesante pinacoteca.
Tampoco podemos dejar de admirar otro símbolo de la ciudad: la Mole Antonelliana, una torre de hierro y aluminio que se alza cerca de la Via Po. Un elegante y futurista ascensor se eleva 167 metros por encima de los tejados de la capital piamontesa hasta una terraza donde el panorama es de lo más romántico (5 €). Los puentes que se tienden sobre el río Po acarician las orillas entre verdes parques.
La tarde es el momento ideal para disfrutar de un cóctel junto con un bufé de tapas (desde 10 €) en los cafés más populares, como el Mulassano (Piazza Castello, 15), una joya del art nouveau, el Torino (Piazza San Carlo, 204), uno de los más elegantes de la ciudad con sus arañas de cristal, o, muy cerca, el San Carlo, que era el lugar donde se citaban los nacionalistas del Risorgimento.
Una vez repuestos, hay que aprovechar que estamos en la zona para hacer algunas compras. En Via Roma se dan cita diseñadores de prestigio como Ferragamo o Dolce&Gabbana, pero si buscamos algo más asequible tenemos que dirigirnos a Via Garibaldi y Via Po, donde encontraremos librerías, zapaterías y pequeñas tiendas de diseño.
Lo mejor son las chocolaterías como Peyrano (Corso Vittorio Emanuele, 11) y Stroppiana (Via Paoli, 51) y las vinotecas como Antico Enoteca del Borgo (Via Monferrato, 4), en la que se pueden probar los excelentes caldos piamonteses. Justo detrás se encuentra el Balón, el mejor de los mercadillos de barrio para encontrar antigüedades, curiosidades y piezas únicas.
Para completar el recorrido histórico es indispensable acercarse a contemplar la Sábana Santa que, a pesar de sus polémicos orígenes, es una referencia obligada para quienes visitan la ciudad. El lienzo está en el Museo de la Sindone, en la Via San Domenico. Y, cuando llega la noche, la cena está servida en AB+ (Via della Basilica, 13), uno de los restaurantes más creativos, en el que el chef Alessandro Boglione ofrece platos nuevos como la costolette di agnello con croccante (desde 24 €).
La mañana del día siguiente hay que dedicarla a pasear por la Cittadella y sus palacios, el llamado centro histórico. La tarde, sin embargo, es para el Quartiere o Quadrilatero Romano, una antigua zona obrera que se ha convertido en el espacio bohemio y con más ambiente de las noches turinesas.
Lo componen los barrios de Borgo Dora, San Salvario y Los Murais, que acogen vinaterías (una especie de bodeguitas), pequeños restaurantes de degustación gastronómica y bares, conformando una atractiva oferta. A medida que transcurre la noche, la fiesta se traslada a orillas del río, a las llamadas Docks Dora, unos antiguos almacenes construidos en 1912 y remodelados.
5 citas imprescindibles para los...
...muy cafeteros.
No dejes de probar, en alguno de los cafés históricos del centro, un exótico espresso al tiramisú o un capuchino a la naranja. Los entendidos son habituales de San Tomaso, 10, donde hay que pedir café Lavazza en alguna de sus variedades más sorprendentes.
... amantes del diseño.
La Pinacoteca Giovanni e Marella Agnelli, cuyo diseño arquitectónico es espectacular, cuenta con un preciado muestrario de obras de Matisse y Modigliani. Además, no te pierdas los cuadros de Picasso, Klee o Warhol en la Galeria Civica d´Arte Moderna.
...cinéfilos.
El Museo Nazionale del Cinema es único en el país. Está en la Mole Antonelliana, cerca de la Via Po. Sus cinco plantas están divididas en ‘capillas temáticas’ en las que se proyectan películas. Así, podemos ver una romántica tendidos en un enorme diván rojo con forma de corazón, o disfrutar de una comedia sentados en un retrete, después de atravesar un frigorífico.
...deportistas
A menos de una hora de Turín está Sestriere (sede de los Juegos Olímpicos en 2006), donde se encuentra la mayor estación de esquí de los Alpes piamonteses. Es el lugar idóneo para la práctica de deportes de invierno a buenos precios. Los más atrevidos pueden incluso probar con el bobsleigh, descenso en trineo por un tobogán de hielo (75 € con guía). Información: www.vialattea.it.
...espíritus gourmet.
Para ellos, el paraíso está en Eataly (Via Nizza, 230), una antigua fábrica del siglo XVIII que se ha convertido en una de las mayores tiendas gourmet de Europa. Además, sus restaurantes son una delicia para el paladar. Podrás descubrir todas las variedades de pasta existentes, más de 40 tipos de vinagre distintos o docenas de quesos italianos irresistibles (se puede comer por 12 €).
Cómo llegar: con Air Europa vuela a Turín desde 99 € más tasas.
Dónde dormir: Hotel NH Santo Stefano. Via Porta Palatina, 19. Telf.: +0039 011 52 23 311. Desde 119 € la habitación doble. Hotel Campidoglio. Via Corio, 11. Telf.: +0039 011 77 65 808. Desde 44 € la habitación doble.
Más info: www.turismotorino.org
Texto & fotos: Ofelia de Pablo.