Revista Mía

Antes del frío... ¡disfruta de las chaquetas!

El otoño es la época idónea para lucir esas chaquetas que en invierno pasan a un segundo plano porque resulta incómodo llevarlas debajo del abrigo. Perfecto, blazer o cardigan, ahora es el momento de que cobren todo su protagonismo.

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El otoño es la época idónea para lucir esas chaquetas que en invierno pasan a un segundo plano porque resulta incómodo llevarlas debajo del abrigo.

Perfecto, blazer o cardigan, ahora es el momento de que cobren todo su protagonismo. ¡Apunta estas ideas!

La cazadora de cuero es una de las prendas más versátiles que existen. El rojo y el negro (cómo no) son los que mandan en esta temporada. Combínala con accesorios animal print o de piel de serpiente! Con pantalón pitillo y falda recta, aciertas siempre.

¡Larga vida a la perfecto! Se ha convertido en una prenda imprescindible en nuestro ropero. Cuanto más la usamos, más nos gusta llevarla.

Los jeans, estrechos, anchos, más o menos rotos (eso ya a gusto de la consumidora), combinan fenomenal con camiseta o sudadera. No pasa nada si ésta sobresale un poco, ya que las superposiciones también son válidas, así como los logos y los mensajes positivos.

¿Y con falda o vestido? ¡Pues también! Aunque, para no perder el espíritu casual, mejor que sean rectos... Los volúmenes, etc., ¡déjalos para la noche!

Te vas de fiesta. Llevas tu vestidazo, tus taconazos y... entonces te asalta la gran duda: “¿Qué me pongo encima de mi outfit?”. ¡La perfecto! Te quitará seriedad e incluso te abrigará un poco del frío.

Eso sí, ya que te decantas por la chaqueta de cuero para la noche, que sea corta (no más abajo de la cintura) y muy ajustada y ceñida. No hace falta recordar que el negro ¡combina con todo! El color, que lo aporten los complementos o el vestido.

¿Una americana es sinónimo de seriedad y sobriedad? No siempre. Depende de con qué prendas y accesorios la acompañes.

Versión femenina, el pantalón o la falda que elijas no tienen que ser del mismo material que la chaqueta. ¡Viva la fusión! Darle un aire menos varonil a la americana no es misión imposible. Lo consigues simplemente con sustituir el pantalón por una falda, ya sea lápiz o en versión más ‘mini’.

Otro plus de feminidad lo marca también lo que lleves debajo. Una blusa ceñida, con algún detalle en el cuello, suma elegancia y, combinada con un pantalón ancho, te va a dar un aire de lo más interesante.

Y, por supuesto, que no falte un buen tacón, porque siempre estiliza. Botas altas, botines tobilleros o stilettos: lo que mejor se adapte a la situación.

Carácter masculino, americanas cuya longitud llega hasta las caderas, que normalmente llevan botones que abrochas o no... Se trata de buscar la comodidad. Que no falte en tu armario: te salvará más de un look.

La versión masculina de la blazer va acompañada (casi por obligación) de pantalones anchos y con bolsillos. ¿Qué zapatos te pones? Planos, los top de esta temporada son los Oxford, en un solo tono o bicolor, al más puro estilo British. ¡Ah! Y si te pones un sombrero, obtienes una nota alta.

Es una de las chaquetas más cómodas que existen. Esta temporada, reivindica también otras facetas de su personalidad. Como jersey o como vestido, una segunda piel. Hay dos maneras de llevarlo: abierto hasta llegar a la cintura o cerrado hasta el último botón. El cinturón te va a dar muchas opciones: si no lo tiene, incorpóralo.

Super chic, el cárdigan es más que esa chaqueta de lana con la que muchas veces te abrigas para estar por casa. Esta prenda pide más presencia en la calle, y esta es su temporada.

No tengas miedo alguno a mezclar colores y tejidos. Atrévete a combinarla no sólo con jeans o con leggings, sino también con falda o shorts. Y si es largo hasta la rodilla, ¿por qué no usarlo como vestido? Así lo sugiere algún diseñador.

Para completar tu look working girl con cárdigan, añádele un bolso grande (de esos en los que cabe hasta el portátil) y alguna pulsera XXL. Y, como toque final, unas bailarinas; eso sí, que sean coquetas.

Aires hippies, si prefieres conservar su esencia bohemia, opta por los tops con encaje y los vestidos estampados y, por supuesto, que tu chaqueta de lana sea de un color más sobrio: un marrón, un crudo... ¡Provenzana total!

El tacón no tiene tampoco mucha cabida; por tanto, será mejor que te decantes por unos botines planos o incluso por unas deportivas casual.

Aunque todavía no han llegado las gélidas temperaturas, un gorro de lana (no muy gruesa) es un complemento de lo más apropiado para este look. Y si le quieres añadir un rollo folk, hazte con un bolso con muchos flecos. Nos gusta con bufanda a juego.

Por: Lluís Valle.

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