Mascarilla para el pelo. Manual de uso
¿Quieres presumir de un cabello nutrido y brillante? Descubre con nuestra experta cómo usar tu mascarilla para conseguir los mejores resultados.
Una se engaña cuando dice que es imposible mantener el pelo hidratado. Con tantos tipos de mascarillas en el mercado, si se aplican de forma correcta hidratan el pelo considerablemente y ayudan a mantenerlo más sano sin tener que ir a la peluquería todas las semanas.
¿Cada cuánto tiempo hay que usar mascarilla?
La frecuencia del uso de la mascarilla depende del tipo de pelo, ya que para el uso diario es mejor utilizar el acondicionador y dejar las mascarillas para las hidrataciones.
- Pelo normal: 2 veces al mes.
- Pelo graso o mixto: 1 vez al mes desde la mitad hasta las puntas, sin tocar la raíz.
- Pelo seco: cada 10 días.
- Pelo dañado por la química: 1 vez a la semana hasta que mejore la calidad del pelo. Luego, seguir de acuerdo con el tipo de pelo que tenga.
- En el caso de llevar tinte o mechas: es importante la hidratación después del proceso químico, aunque hayas hecho una hidratación la semana anterior. Es imprescindible hidratar el pelo después de cada proceso químico para evitar que el pelo se deteriore.
Si el pelo no se lava correctamente, el exceso de grasa e impurezas impedirá que la mascarilla actúe bien en la hebra y no consiga el efecto que esperamos. Por eso es muy importante lavarlo muy bien antes de hidratarlo.
Hidratar el pelo mientras te duchas es extremadamente práctico (las famosas mascarillas que actúan en 1 minuto nos incitan a hacerlo bajo la ducha), aunque hay ciertos puntos negativos. Al aplicar la mascarilla mientras te duchas el producto se diluirá por el exceso de agua que llevas en el pelo y hará que pierda su eficacia.
Evítalo
Para evitarlo, es mejor quitar el exceso de agua del pelo, desenredarlo con un peine de púas largas y aplicar la mascarilla. Al terminar de ducharte, acláralo con abundancia. En este caso la mascarilla habrá actuado correctamente.
Lo ideal es aplicar la mascarilla mecha por mecha masajeando cada mechón. Para pelos normales y secos podemos acercarnos un poco a la raíz, con un máximo de 4 dedos de distancia. Desde pelo mixto a graso, lo importante es evitar la raíz aplicando, por tanto, solo de medio a puntas.
Cantidad no es calidad
Evita cargar el pelo con la mascarilla. No es la cantidad lo que marca la diferencia y sí la manera de aplicarla. Lo importante es que todo el pelo reciba el producto de manera equilibrada.
No superes el tiempo estimado
No dejes la mascarilla toda la noche o todo el día. Lo recomendable son 30 minutos para una hidratación profunda. Pasar de ese tiempo no optimiza el efecto, sino al contrario, reseca el cabello.
Después de aplicar la mascarilla, coloca un gorro de ducha sobre el cabello. Luego, humedece una toalla o un turbante para recoger el pelo y caliéntalo un poco en el microondas. Pon la toalla encima del gorro de ducha y repite el proceso durante los 30 minutos recomendados, en el cual tendrás que volver a calentar la toalla. El calor ayuda a abrir la cutícula y garantiza una mejor absorción de sus nutrientes.
Después de la hidratación aclara bien el pelo con agua templada o fría. No dejes residuos de la mascarilla y tampoco aclares el pelo con agua muy caliente. El calor del agua abrirá la cutícula haciendo que se pierda la hidratación conseguida. El agua tiene que estar ligeramente fría para sellar la cutícula y evitar el “frizz”, sin contar que lo deja más brillante.
- La mascarilla NO es un acondicionador para utilizar todos los días.
- No todas las mascarillas son iguales.
- La mascarilla no es un 'leave-in'.
- La mascarilla requiere un tiempo de reposo.
- La mascarilla oxida.
Por: Valéria Costa, peluquera de Aquarela Peluqueros.