Charlene de Mónaco devuelve el brillo a la Gala de la Cruz Roja
Desde su llegada al acto, Charlene volvió a convertirse en el centro de todas las miradas. No sólo por su espectacular look, sino también por el gesto serio en su mirada.
Antes de comenzar con la celebración, los presentes dedicaron un minuto de silencio por las víctimas del atentado ocurrido en Niza.
De nuevo, Charlene deslumbró a todos los presentes gracias a su elección de estilo firmada por Valentino.
Esta es una de las contadas ocasiones que pudimos ver sonreír a Charlene. Unas sonrisas demasiado puntuales que han hecho estallar todo tipo de rumores.
En la mayoría de los momentos inmortalizados por los periodistas, Charlene volvió a ser la princesa triste de Mónaco.
Este baile benéfico, que comenzó impulsado por la princesa Grace en los años 50, ya va por su 68ª edición, se ha vuelto a convertir en el gran acontecimiento del verano en Mónaco.
Esta aparición de la princesa Charlene es muy distinta a la que protagonizó hace unas semanas, poco tiempo antes de hacerse público que su 'contrato matrimonial' firmado el día de su boda había expirado. En aquel momento Charlene se mostró mucho más tranauila, relajada y sonriente.
Aunque la han conocido con el apodo de la princesa triste y los rumores aseguran que su relación con Carolina es cada día más difícil, Charlene muestra en momentos contados ciertos atisbos de felicidad.
