Los duques de Cambridge visitan el Taj Mahal 24 años después de Lady Di

Han pasado ya 24 años desde que se hiciera esta foto. Una imagen que ha quedado para la Historia. Una Diana ausente y cabizbaja posaba frente al Taj Mahal, uno de los mayores símbolos del amor vestida con un precioso diseño color block de Catherine Walker que marcaría tendencia en el que sería su último viaje antes de anunciar su separación. Nadie sospechaba entonces lo que ocurriría pocos meses después. Ahora su hijo viaja al mismo lugar y rinde tributo a su madre, acompañado de su esposa, pero evita, en todo momento que se repita la imagen de una mujer de la familia Windsor posando sola frente a la obra más grande jamás creada en pos del amor.

Llevan más de una semana recorriendo La India y regalándonos imágenes que dan prueba del excelente momento personal que atraviesan. Kate y Guillermo son, sin duda, el relevo perfecto para la monarquía británica y la reina Isabel lo sabe. En su viaje no podía faltar la visita a Agra, al Taj Mahal, donde han podido disfrutar de una visita privada porque se han cerrado parte de las instalaciones para que estuviesen más tranquilos.

Jóvenes, guapos y enamorados. Kate y Guillermo encarnan el ideal de pareja perfecta. Con la mirada son capaces de decirlo todo. Irradian felicidad. Sentados en el mismo banco que la fallecida Diana, los Duques se dedican una tierna mirada, igual que han hecho durante todo su viaje.

El Taj Mahal, considerado una de las Siete Maravillas del Mundo y Patrimonio de la Humanidad es una de las mayores manifestaciones al amor que jamás ha existido. Su nombre significa "Palacio de la Corona" y fue construido por el emperador mongol Shah Jahan en honor de su esposa favorita, que murió al dar a luz a su decimocuarta hija. Aunque lo más conocido es el mausoleo cubierto por la cúpula de mármol blanco, el conjunto cuenta con varios edificios y preciosos jardines.

Para que estuvieran más cómodos en su visita a esta joya arquitectónica, la autoridad para el patrimonio arqueológico de La India restringió el acceso al público general al ala izquierda del edificio. Pese a que estaba previsto que el recorrido durara dos horas, finalmente en apenas cincuenta minutos, Kate y Guillermo ya habían visitado todo el monumento, acompañados por un guía que les iba explicando todos los detalles del monumento.

Kate y Guillermo no dudaron en posar para algunos turistas que querían inmortalizar su visita al mítico monumento.

Para su visita, los Duques eligieron un outfit cómodo y elegante. Kate, con un precioso vestido estampado en blanco y azul klein de la firma Naem Khan, zapatos nude de LK Bennett y estrenó unos pendientes que compró durante su excurdión al monasterio del "Nido del Tigre". Guillermo, en su línea, con pantalón chino beis, camisa blanza y blazer azul.

Durante todo la visita, los Duques no dejaron de dedicarse miradas y gestos cómplices. Anque en esta ocasión prefirieron dejar a los pequeños Georfe y Charlotte en casa y disfrutar de un tiempo solo para ellos, Kate y Guillermo dieron muestra constante del fantástico momento personal en el que se encuentran.

Esta ha sido la última etapa del viaje oficial que los Duques iniciaron el 10 de abril. Han pasado por Bombay, Nueva Delhi, el Parque Nacional de Kaziranga en Assam, la reserva de rinocerontes con un cuerno, Bhután, y Agra, donde han puesto punto y final a un viaje en el que los estilismos de Kate no han dejado indiferente a nadie.

Siempre derrochando simpatía, Kate y Guillermo no dudaron en juntar las manos e inclinar la cabeza en el tradicional saludo indio. Todo un ejemplo de educación y cortesía.