Los ocho 'secretos' de Hillary Clinton

Aunque ya es un secreto a voces, hasta hace poco tiempo no se conocía con detalle el pasado republicano de Hillary Clinton. Aunque lleva más de 40 años defendiendo las causas demócratas, durante su juventud estuvo afiliada a varios partidos conservadores.

Hillary Rodham, que ése era su apellido de soltera, tardó en dar el sí quiero a un joven Bill Clinton. Hasta tres veces le pidió matrimonio (la primera en el año 1973), finalmente se casaron en el año 1975.

Cuando era pequeña nunca soñaba con hacerla política. De hecho, según confiesa ella misma en su libro 'Living History', su sueño de adolescente era ser astronauta.

Antes de ser primera dama, Hillary tuvo una refutada y exitosa trayectoria profesional de la abogacía. Trabajó como abogada de importantes bufetes que le ayudó a tener unos buenos ingresos económicos (superando incluso a los de su pareja como gobernador de Arkansas). Uno de sus trabajos más importantes tuvo lugar cuando, junto al equipo legal con el que trabajaba, trataron de demostrar la participación de Nixon en el caso Watergate.

Una de las propuestas más aplaudidas de Barack Obama, el 'Obamacare' (el seguro de salud obligatorio), era en realidad una inicitiva de Hillary Clinton. "Se llamaba Hillarycare antes que Obamacare", explicó la ahora candidata a la Casa Blanca.

Varios medios conservadores acusaron a la demócrata de ser lesbiana y bisexual. La reacción de sus enemigos no se hizo esperar y los sectores republicanos más activos lo utilizaron como argumento para arremeter contra ella y llegaron a criticar incluso su falta de interés por su apariencia en su etapa adolescente.

El prestigioso periodista Bob Woodward (que curiosamente destapó el caso Watergate), afirmó en su libro 'The Choice' (1996) que Hillary tenía conversaciones imaginarias con su referente Eleanor Roosvelt y Mahatma Gandhi como método de liberación terapeútica.

En una entrevista que Bill Clinton concedió a un programa de radio en el año 2004, el ex presidente confesó que la relación con su esposa era similar a la de Franklin y Eleanor Roosevelt. Trabajaban juntos en la Casa Blanca pero llevaban vidas separadas