Revista Mía

Secretos para preparar la mejor sangría

Es una de las bebidas más populares del verano, pero ¿sabes cómo prepararla correctamente? Te contamos todos los trucos.

Llega el verano y el calor, las sobremesas se alargan y qué mejor para acompañarlas que una buena sangría. Esta popular bebida está tradicionalmente elaborada con fruta variada y picada, mezclada con vino tinto, azúcar y algún licor como el coñac o el cava.

A pesar de ser una receta asociada a nuestro país, su origen no está claro, aunque algunos señalan que es una bebida típicamente mediterránea que comenzó a ser preparada por campesinos que aprovechaban de esta manera los productos de la tierra como el vino y las frutas para refrescarse, hay quien afirma que proviene de las Antillas (cuando era colonia británica) y que era consumida por ingleses y franceses.

Pero, sea cual sea su origen, sobre lo que no tenemos ninguna duda es sobre sus ingredientes principales, el vino y la fruta, y de que es una de las bebidas españolas más populares en verano.

Para preparar una buena sangría debes grabarte a fuego esta regla de oro: no vale cualquier vino. Es importante utilizar siempre un buen vino joven, en el que predomine la fruta.

Si el vino es de calidad, puedes incluso preparar hielos hechos con el propio vino o hielos hechos con los refrescos que se vayan a incluir, para no aguar la bebida demasiado. Un buen truco para refrescar vinos blancos y rosados es utilizar uvas congeladas en vez de los tradicionales cubitos, aportando sabor a fruta sin desvirtuar su sabor. Refrescante, ¿verdad?

Otra cosa que deberías saber es que se sirve en jarra, no en coctelera por lo que no puede ser considerada un cóctel, y no se sirve en copa sino en vaso.

Pero, ¿cómo hacerla? Primero se disuelve el azúcar en un poco de agua caliente para formar un almíbar, después, en un recipiente amplio se coloca el vino y el almíbar y se añade zumo de naranja natural removiendo para que se mezcle bien. Después se van echando las frutas, peladas y cortadas en trozos pequeños para facilitar su maceración, y se añade el zumo de limón, canela y las especias o hierbas frescas que más te gusten.

Tras la maceración (que puede ser desde tres horas a un día entero), se vuelca en una jarra, se añade el refresco o 'ginger ale' antes de servir con copita del licor que prefieras y se sirve con hielo y adornada con piel de naranja.

tracking