
7 grandes errores de belleza que solemos cometer

Todas sabemos lo importante que es lavar bien el rostro al levantarnos y, fundamentalmente, después de todo el día para retirar los restos de suciedad, sudor y maquillaje. Si no lo hacemos, los poros se obstruyen y aparecen granitos, sin embargo, no terminamos de concienciarnos y seguimos saltándonos este paso o dedicándole muy poco tiempo. Recurre al tónico o al agua micelar para una limpieza perfecta.

Las utilizamos constantemente y están una y otra vez en contacto con la piel. Lo más adecuado es lavarlas cada cierto tiempo para eliminar la suciedad y evitar contagiar posibles pequeñas alergias a diferentes zonas del rostro.

Pasa constantemente: elegir una base de maquillaje mucho más oscura que nuestro tono de piel no es buena idea. El maquillaje, cuanto más natural, más bonito queda. Evita el efecto máscara y cuidado con los cortes que suelen quedar entre la tonalidad de la cara y el cuello al aplicarnos el maquillaje…

Los cosméticos caducan y sus propiedades se ven alteradas. Es muy habitual que compremos productos de maquillaje y cosmética y no tengamos en cuenta la fecha de caducidad al utilizarlos, cosa que puede provocar alergias o reacciones en la piel. El tónico suele durar en óptimas condiciones unos 6 ó 12 meses, la fecha de caducidad aproximada de las mascarillas es de unos 3 meses, la caducidad de la crema hidratante es de un año desde que se ha abierto, al igual que la del maquillaje en crema. El maquillaje en polvo dura unos 24 meses, el lápiz de ojos entre 12 y 18 meses, al igual que las barras de labios.

¡Ojo con la depilación de cejas! Unas cejas bien depiladas son muy favorecedoras, pero si nos pasamos podemos conseguir esa poco favorecedora expresión de sorpresa constante…Si quieres rediseñar tus cejas, mejor acude a los expertos y si quieres una depilación natural, elimina solo los pelos que sobresalgan y dales algo de forma a tus cejas de manera natural.

Un poco de colorete da vida a nuestro rostro, pero pasarnos no es nada favorecedor. Lo mejor es elegir un tono de colorete similar al que adquiere nuestra piel cuando está ligeramente bronceada.

Los usamos a diario y están en contacto con la grasa capilar, además podemos tener caspa, se desprenden pieles muertas del cuero cabelludo, etc. Es necesario quitar los pelos que se quedan en el peine o cepillo y lavarlo cada cierto tiempo con champú para cabello graso o una gotita de lavavajillas.