Refuerza tus defensas con tu alimentación
Una dieta equilibrada y saludable es vital para reforzar tu sistema inmunológico. Nuestra experta de Doctoralia te explica cómo conseguirlo.
Una dieta sana y equilibrada puede contribuir a reforzar las defensas a través de la comida, aportándole todos aquellos nutrientes necesarios para hacer frente a situaciones de estrés. El mantenimiento del sistema inmunológico requiere un consumo de todas las vitaminas y minerales necesarios, además de otros nutrientes, y para ello es fundamental seguir una dieta equilibrada que incluya, por ejemplo, frutas y verduras. No es que una fruta puntual nos cure el resfriado, son los nutrientes de ésta y otras muchas frutas y alimentos de forma cotidiana los que logran que los mecanismos inmunitarios funcionen y se activen cuando sea necesario. Desde Doctoralia nos explican cómo conseguir una dieta equilibrada.
Un sistema inmunológico fuerte
Tal y como explica la Dra. Ana Márquez, dietista-nutricionista de Doctoralia, el sistema inmunológico es el encargado de protegernos frente a las enfermedades y es tremendamente complejo. En la actualidad se investigan diferentes factores dietéticos que afectan a la respuesta inmunológica de nuestro organismo.
Carencias nutricionales
Está demostrado que las personas malnutridas, por defecto o por exceso, tienen un mayor riesgo de contraer infecciones. Por ello es importante que si nos proponemos perder peso acudamos a la consulta de un dietista-nutricionista que nos asesore, pues las "dietas milagro" pueden suponer un riesgo para la salud por su desequilibrio y carencias nutricionales y energéticas.
Hablar de reforzar las defensas a través de la comida nos lleva también a hablar de la microbiota (conjunto de microorganismos que hay en el tracto digestivo y en otras zonas del cuerpo). Las dos grandes funciones de la microbiota del intestino son colaborar con la nutrición y estimular y regular el sistema inmunitario.
Protección contra infecciones
Por lo tanto, una microbiota intestinal adecuada repercute directamente en nuestra salud: ayuda a sintetizar vitaminas, a eliminar compuestos tóxicos, a mantener la función gastrointestinal adecuada, nos protege de infecciones bacterianas, regula el metabolismo intestinal y por supuesto ayuda a mantener al sistema inmunitario activo y estable. Por ejemplo, los bebés alimentados con leche materna mejoran su flora intestinal de modo que aparecen efectos positivos en su sistema inmunitario y mejora su resistencia a las infecciones.
Nuestra experta recomienda que incorporemos ciertos hábitos en nuestra dieta que nos ayudarán para mantener un sistema inmunológico fuerte.
- No hay ningún alimento que nos refuerce las defensas por sí mismo, o nos cure de un resfriado, pero sí hay muchos alimentos, repletos de vitaminas, minerales, fibra dietética o antioxidantes que participan en el correcto funcionamiento del sistema inmunitario y en la salud de la flora intestinal beneficiosa. Si dicho sistema funciona bien es probable que enfermemos menos.
- Llenemos nuestra cesta de la compra con frutas y verduras de colores diferentes, de temporada y de producción local.
- El consumo de frutos secos, legumbres y granos enteros es una opción necesaria para mejorar el aporte de nutrientes necesario para la salud de la microbiota y del sistema inmunitario.
- Disfrutando estos alimentos y cocinándolos adecuadamente estamos aportando selenio, zinc, vitaminas como la C, la A, fibra dietética… Así estaremos cuidando y previniendo patologías cardiovasculares, diabetes, hipertensión, estreñimiento, sobrepeso, obesidad...