4 razones para comer despacio
Debido al estrés o a una ya asumida forma de comer, mucha gente ni saborea ni se nutre como se debe a la hora de comer.
Debido al estrés o a una ya asumida forma de comer, mucha gente ni saborea ni se nutre como se debe a la hora de comer.
La costumbre de comer de una manera acelerada, prácticamente sin masticar, es el causante de una mala digestión y de un exceso de peso. Comer despacio y con tranquilidad permite al cuerpo ingerir todos los nutrientes de los alimentos y favorece una mejor digestión de las comidas. Aquí te damos 4 razones para que a partir de hoy mejores tu vida comiendo lentamente.
1. Favorece la digestión. Al comer despacio el proceso digestivo es mucho mejor y se evitan problemas como la acumulación de gases o de dolores estomacales. Si tu digestión es complicada con dolores e hinchazones, es aconsejable que comas de una manera tranquila y masticando cada bocado. Si comes rápido y sin masticar provocas que el estómago no pueda asimilar la cantidad de comida ingerida, provocando problemas tan típicos como la acidez estomacal o los molestos gases.
2. Perder peso. Relajarse y disfrutar de la comida que se ingiere ayuda a perder peso y a adelgazar. Al comer más despacio te das cuenta de lo que vas ingiriendo, por lo que consumes las calorías necesarias y justas sin necesidad de pasarte. Comiendo de esta manera, el cerebro manda una señal al estómago de que quien ingiere el alimento se siente lleno mucho más rápido sin tener que comer grandes cantidades de calorías. Masticar bien y de forma pausada ayuda a eliminar esos kilos de más de una manera rápida y eficaz.
3. Eliminar bacterias. Otro de los grandes beneficios es que se consiguen eliminar completamente todas las bacterias que se encuentran en los alimentos. Si se come demasiado rápido, los alimentos no consiguen metabolizarse como es debido, lo que provoca que en el estómago se puedan formar bacterias de todo tipo que ocasionen problemas, como los gases, la diarrea o los dolores. Masticar de una manera pausada y tranquila ayuda a salivar mucho más, evitando de esta forma la aparición de problemas bucales como las caries o de placa dental.
4. Mejora el estado de ánimo. Si se mastica lentamente y se come despacio se disfruta mucho mejor de todos los sabores de la comida. En consecuencia, en caso de tener un alto nivel de estrés en tu día a día, el disfrutar de la comida te permitirá mejorar tu estado de ánimo y ser mucho más feliz, pensando en “lo bueno que está” lo que ingieres y no en los problemas del día a día en la oficina, en tu casa o de cualquier tipo.
Es importante que dediques unos 20 minutos a cada comida ya que de esta forma te podrás sentir saciada mucho antes y evitar comer en exceso. Por otra parte, es recomendable masticar cada bocado unos 20 veces y beber continuamente agua para lograr aminorar el ritmo a la hora de comer.
Por último, un consejo: no comas de pie, siéntate a la mesa preparada para la ocasión, relájate y disfruta de tus alimentos.