Cómo reconocer a un maltratador

El maltrato se puede llegar a confundir con amor, mientras que únicamente oculta conductas manipuladoras. Los celos son un claro síntoma de posesión, control y manejo.Realmente, no hay un perfil exhaustivo que determine que una mujer puede convertirse en víctima de ">violencia de género.

Cualquier mujer, por el hecho de ser mujer, puede ser maltratada. Las mujeres víctimas de violencia de género a menudo sufren ansiedad y asumen como “normales” algunas situaciones y conductas que se dan en sus relaciones que, de normales no tienen nada.

La violencia de género no solo se basa en golpes, de hecho, es mucho más frecuente el maltrato psicológico y emocional que la violencia física.

Signos de maltrato

1. Se pone celoso por hablar con cualquier persona del sexo opuesto.

2. Insiste en saber qué has hecho y con quién.

3. Te monta ‘numeritos’ en cualquier sitio.

4. Le molesta que le contradigas, o que tengas una opinión diferente a la suya.

5. No te deja salir con tus amigas.

6. Te presiona para que no te pongas cierta ropa, o para que no vayas maquillada de tal manera.

7. Te ha empujado, pegado o abofeteado.

8. Amenaza con dejarte e intenta controlar todos tus actos.

9. Organiza tu tiempo libre.

10. Si tiene algún problema él, te responsabiliza a ti.

11. Utiliza el chantaje emocional para conseguir lo que quiere.

12. Es él quien toma las decisiones importantes que afectan a la vida de ambos.

13. Sientes miedo de cómo pueda reaccionar.

14. Te hace dudar de tus capacidades.

15. Sientes inferioridad.

16. Te llama o te envía mensajes vía Whatsapp constantemente.

17. Te ha presionado para mantener relaciones sexuales.

Si en algún momento te has sentido identificada con estos aspectos y reconoces a tu pareja en, al menos, tres de los puntos anteriores, piensa en ti misma primero. Incluso a veces con reconocerle en uno solo basta, ¡déjale!

Las consecuencias del maltrato

El maltrato deja una huella importante en las mujeres que lo sufren. Reponerse ante una violencia de este tipo no es nada fácil. Deja secuelas como el estrés o la ansiedad, la baja autoestima, irritabilidad, sentimiento de inferioridad, dependencia emocional, problemas de en la alimentación, aislamiento… y un largo etcétera. ¡Planta cara a la violencia de género!