Alimentos que serán tus aliados si llevas una vida fitness
Si eres una deportista nata o practicas actividad física habitualmente, estos alimentos pueden resultarte muy útiles para reponerte después del ejercicio. Te contamos por qué son tan beneficiosos y cómo puedes comerlos.
Si llevas un estilo de vida en el que la actividad física, el deporte y todo aquello relacionado con el universo fitness, has de saber que existe una serie de alimentos que vendrán genial a tu organismo, especialmente a reponerse después de los entrenamientos y a seguir desarrollándose y mejorando. Te contamos cuáles son (quizá muchos ya te resulten familiares) y cómo puedes incluirlos en tu dieta.
Leche
Su contenido en agua resulta hidratante y destaca su carga de proteínas, que ayudan a sanar y poner los músculos y reabastecerlos de azúcar. Por su parte, el calcio es saludable para los huesos y por ese motivo este alimento bebible es excelente para quienes están aumentando sus niveles de actividad. Un vaso tibio antes de acostarse también puede ayudar a que te quedes dormida más fácilmente y facilitará tu descanso gracias a sus proteínas de caseína de digestión lenta y su capacidad para aumentar la serotonina y la melatonina, que inducen el sueño.
Además, la leche contiene los dos ingredientes esenciales que necesitas después de un entrenamiento: carbohidratos para dar energía y proteínas para reparar los músculos. Puedes tomarla sola o incorporarla a batidos, por ejemplo.
Frutas deshidratadas
Con un alto contenido de azúcares naturales, las frutas secas (como los albaricoques, las pasas o el mango) constituyen una fuente concentrada de carbohidratos, lo que las convierte en un gran aporte de energía. También nos aportan una dosis de fibra, potasio, fitonutrientes, vitaminas y minerales con cada bocado. Si por ejemplo practicas el running, trata de tomar una o dos porciones antes de una carrera y de dos a tres porciones por cada hora de carrera.
Brócoli (y otras verduras verdes)
Este tipo de hortalizas contienen antioxidantes que eliminan los radicales libres, fibra que promueve la digestión, además de todo un ejército de vitaminas y minerales. El brócoli, junto con la col rizada o kale, la espinaca y el repollo son algunos de los alimentos más ricos en nutrientes que encontrarás en prácticamente todos los supermercados. También son una gran fuente de ácido fólico, que resulta beneficioso para la salud del corazón y para las mujeres embarazadas, ya que promueve el correcto desarrollo del feto.
También son importantes fuentes de calcio vegetal y pueden ser una buena alternativa a los productos lácteos. Los niveles bajos de calcio te hacen más vulnerable a las fracturas por estrés, especialmente si practicas deportes de resistencia, así que asegúrate de consumir suficiente calcio en tu dieta.

rodajas de batata
Batata
Lleva de ‘moda’ en el mundo foodie ya varios años y es que puedes triturar, hornear o convertir en paté este tubérculo, que además resulta muy sabroso. Las batatas son ultraversátiles y son una opción más saludable que las patatas normales, y que contienen betacaroteno, hierro, fibra y vitamina C que combaten enfermedades.
Las batatas son una adición ideal a una dieta rica en carbohidratos y va genial consumirlas antes de una carrera larga, por ejemplo. También tienen un alto contenido de electrolitos de potasio, que pueden ayudar a prevenir los calambres musculares durante el ejercicio.
Nueces de Brasil
Todas las nueces están llenas de vitaminas, minerales y fibra, pero las nueces de Brasil también son una de las fuentes más potentes de selenio, un mineral y micronutriente que ayuda a mantener un sistema inmunológico saludable y puede ayudar a proteger contra enfermedades cardíacas. Las grasas "buenas" saludables para el corazón en los frutos secos ayudan a reducir los niveles de colesterol malo, pero consúmelas con moderación, pues pueden tener un alto contenido de calorías si comes demasiadas.
Aumentar los niveles de ejercicio y actividad física que practicas pueden provocar que tengas más apetito, por lo que es importante elegir snacks que contengan nutrientes y controlen el hambre. Las nueces son una opción idónea para ello.