Alimentos que ayudan a combatir el calor
En momentos de calor muy intensos, como los que vivimos en verano, es importante mantener una correcta alimentación e hidratación para conservar los mecanismos de termorregulación en buen estado.
Esta premisa de tener la dieta correcta para no aumentar la temperatura corporal es todavía más importante si se trata de personas que tienen un alto riesgo de sufrir golpes de calor como pueden ser las personas mayores, las que padecen enfermedades crónicas o los niños más pequeños de la casa. Con una buena alimentación y, especialmente, hidratación, evitaremos estos problemas tan frecuentes del verano.

Mantener la termoregulación
La termorregulación o regulación de la temperatura es la capacidad que tiene el organismo para modificar su temperatura dentro de ciertos límites, incluso cuando la temperatura del entorno es bastante diferente al rango de temperaturas objetivo. Este término se utiliza para describir los procesos que mantienen el equilibrio entre la ganancia y la pérdida de calor. Si se añade o quita una determinada cantidad de calor a un objeto, su temperatura aumenta o disminuye, respectivamente, en una cantidad que depende de su capacidad calorífica específica con un ambiente.

Picantes
Cuando comemos alimentos fríos la temperatura corporal desciende, pero el cuerpo tiende a aumentarlo para regularla. Por ello, la secreción de sudor que provoca comer alimentos picantes ayuda a que la piel se refrigere.

Calabacines
El calabacín es otro de los alimentos con alto contenido en agua (en concreto tiene un 95%) y con muy poco aporte calórico. Es una gran fuente de vitamina A, que ayuda a mantener saludables la piel, la vista y el sistema inmunológico, y de vitamina C, necesaria para la producción de colágeno.

Sandía y melón
Si en un día normal la ingesta de agua es muy importante, en momentos de calor intenso hay que aumentarla notablemente. Ambos alimentos son muy refrescantes por su alto contenido en agua por lo que ayudan a combatir el calor. Además, aportan fibra y minerales, lo que ayuda a nuestro organismo a recuperarse de las pérdidas de magnesio y potasio que se producen con el sudor.

Melocotón
El melocotón es una fruta refrescante y propia del verano. Está compuesta en un 87% de agua, por lo que ayuda a que el cuerpo esté hidratado. Contiene, además, hierro, potasio y vitamina C que contribuyen a mantener el sistema inmunitario en buen estado.

Moras y frambuesas
Son ricas en antocianinas lo que permite disminuir la presión arterial y facilitan la vasodilatación, con lo que ayudan al cuerpo a bajar su temperatura a través de la circulación.