Cada vez son más las opciones veganas y vegetarianas que se comercializan en supermercados y grandes superficies comerciales. Muchas de estas opciones están pensadas para suplir las carencias de proteína de las que, a priori, adolecen las dietas exentas de carne y pescados. La soja es, en sus muchas variantes, una de las fuentes principales de este aminoácido y una de sus versiones más conocida (en parte por la popularidad de la cocina asiática) el tofu. Pero no es la única forma de comer soja en formato sólido, existe otra que quizá sea menos conocida para el gran público, pero (sin duda) goza de gran popularidad entre el público vegano y vegetariano. Hablamos de la soja texturizada.
El proceso de obtención de la soja texturizada comienza con la extracción del aceite de las habas de soja que, refinado, se convierte en aceite de soja. El residuo sólido que queda después de desgrasar las habas de soja se deshidratan para hacer la harina de soja. Esta se somete a un proceso de extrusión a alta temperatura y presión que da como resultado un producto que a simple vista puede ser parecido a las migas, cortezas o trozos de pan seco.
El producto resultante, la soja texturizada es un alimento de bajo contenido en grasas saturadas y sal, libre de azúcares, gran fuente de fibra y muy rico en proteínas y carbohidratos de calidad. Los valores nutricionales por 100 gramos de soja texturizada son 364 kcal, 4 g de grasas, de las cuales 0,6 g son saturadas, 30 g de carbohidratos, 4 g de fibra, 50 g de proteína y 0,04 g de sal.
La soja texturizada se vende, generalmente, envasada y deshidratada, sin sabores ni especias. Existen varios tipos de soja texturizada deshidratada: soja texturizada gruesa, fina, en tiras, en cortezas y trozos de distintos tamaños, oscura y en filetes.
Para su consumo, primero hay que hidratarla, ya que la hidratación mejora su digestibilidad y textura. Puede hidratarse simplemente con agua o un caldo de verduras poniendo 2,5 veces el peso de la proteína de soja.
Te contamos mucho más sobre las propiedades de la soja texturizada y de qué forma prepararla en la siguiente galería.
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¿De dónde se obtiene la soja texturizada?
La soja texturizada se obtiene de la soja, o mejor dicho: de la harina de soja. No contiene aditivos químicos ni colorantes y es 100 % natural. Al ser un formato deshidratado, aguanta mucho tiempo en tu despensa hasta caducar.
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Valores nutricionales
Se trata de un producto muy pobre en grasas saturadas y sal, libre de azúcares, gran fuente de fibra y muy rico en proteínas y carbohidratos de calidad. Los valores nutricionales por cada 100 gramos son 364 kcal, 4 g de grasas, de las cuales 0,6 g son saturadas, 30 g de carbohidratos, 4 g de fibra, 50 g de proteína y 0,04 g de sal.
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Rica en isoflavonas
La soja texturizada como otros productos a base de soja como tofu o leches vegetales, contiene una cantidad apreciable de isoflavonas que actúan en tu organismo como un poderoso antioxidante.
Puedes adquirirla en diferentes formatos
La soja texturizada se comercializa envasada y deshidratada, sin sabores ni especias. Existen varios tipos de soja texturizada deshidratada, como se puede apreciar ver en esta imagen: soja texturizada gruesa, fina, en tiras, en cortezas y trozos de distintos tamaños, oscura y en filetes
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Soja texturizada en forma de filetes
Los filetes de soja texturizada son una buena compra, pues te pueden sacar de un apuro en un momento. Solo has de hidratar, dorar y ya tienes un plato perfecto para acompañar con verduras, cereales o purés.
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Tamaño de la soja texturizada
Después de hidratada, la soja texturizada aumenta su tamaño hasta tres veces, por lo que es importante tenerlo en cuenta cuando estás calculando las proporciones, ya que es fácil pasarse.
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Hidratar antes de usar
Para su consumo, primero hay que hidratarla. Recuerda que si la echas a un guiso sin hacerlo antes, consumirá parte de su caldo. Puedes hidratarla en el agua donde hayas cocido las verduras, para realzar su sabor. La hidratación mejorará su digestibilidad y textura. Déjala en remojo durante, al menos, 20 minutos.
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Perfecta como ingrediente en salsas
La soja texturizada es una gran opción para usar con salsas. Este ingrediente absorberá parte del sabor de las mismas y le dará un toque muy interesante. Es un clásico de la salsa boloñesa vegana.
@netasyle
Sustituto de la carne picada
Desde la cuenta de Instagram de @netastyle nos llega esta receta realizada con soja texturizada, gnocchis integrales con boloñesa vegana. Para la salsa, se ha sustituido la carne picada por soja texturizada. El resultado, como ves, no puede ser mejor.
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Conservación de la soja texturizada
Si has hidratado más soja texturizada de la que necesitabas, puedes guardarla en el frigorífico durante cuatro días, al menos, y poder consumirla como recién hidratada.