Digestiones pesadas, intolerancias, inflamaciones... Cada vez son más las personas que sufren problemas de estómago. Generalmente se producen por malos hábitos alimenticios y los cambios de ritmo de vida, dos aspectos que influyen directamente sobre esta parte de nuestro organismo. Es importante identificar qué es lo que está deteriorando nuestra salud digestiva para ponerle remedio cuanto antes. ¿Quizá es que comes demasiadas grasas saturadas? ¿Bebes mucho café? ¿Abusas del picante? Si es así, debes saber que estos tres hábitos influyen negativamente en el intestino.
Una buena digestión es muy importante para tener una buena salud, pues de ella depende la absorción de nutrientes que el cuerpo necesita. Los órganos del aparato digestivo, de manera autónoma, digieren los alimentos y para luego absorber sus elementos básicos e incorporarlos al torrente sanguíneo. Sin embargo, tener problemas de digestión es más común de lo que parece. En muchos casos se debe a un exceso de salsas, fritos, rebozados o bebidas gaseosas, los mayores enemigos del intestino. Por suerte, es muy fácil ponerle remedio y reemplazarlos por alimentos ricos en fibra, nutriente básico para nuestro cuerpo que mejora las digestiones y evita problemas como el estreñimiento. Lo encontrarás en frutas y verduras y alimentos como la avena o las legumbres (garbanzos, judías, lentejas, etc).
Si sueles sentirte pesada después de comer, hay ciertas claves para hacer una buena digestión que pueden ayudarte. Huir de los alimentos ultraprocesados es una de las mejores cosas que puedes hacer por tu salud general, pero sobre todo a nivel digestivo. Además, procura emplear métodos de cocción saludables y nada de freír, mejor a la plancha, al vapor o al horno.
En cuanto a los alimentos más beneficiosos para el intestino, el yogur es uno de los más conocidos por ello debido a su alto contenido de probióticos. Además de este sano lácteo, existen otros alimentos que pueden hacer mucho bien a nuestro sistema digestivo. Entre ellos se encuentran el kiwi, el rábano o las fresas. En la galería te desvelamos la lista al completo de los mejores aliados para el intestino y la digestión. ¡Que nunca falten en tu cocina!
Aceite de oliva
El alimento estrella de la dieta mediterránea es también uno de los más indicados para cuidar el estómago, pues protege del reflujo gástrico que da lugar a la acidez. Además, ayuda a que el contenido del estómago se libere lentamente al duodeno, haciendo que nos sintamos saciadas durante más tiempo.
Alcachofas
Son muy ricas en fibra, lo que las convierte en un buen digestivo natural que alivia la acidez. Sus propiedades digestivas la convierten en un alimento ideal para ayudar a tratar el ácido úrico y los problemas de cálculos en la vesícula biliar. Si te encantan las alcachofas, toma nota de este salteado de alcachofas, gambas y chipirones.
Fresas
Las fresas son ricas en vitamina C, micronutriente que estimula la secreción de enzimas que estimulan la digestión. Además, la vitamina C ayuda a una mejor asimilación del hierro contenido en ellas.
Jengibre
El jengibre estimula el páncreas, por lo que a su vez permite la producción de enzimas que favorecen la digestión de los alimentos. Por ende, ayuda a disminuir las malas digestiones y los síntomas asociados a estas, como los gases.
Kéfir
El kéfir es un probiótico con muchos beneficios para el organismo y, en concreto, el intestino. Este alimento ayuda a regenerar la flora intestinal, facilitando así la digestión y eliminando los problemas de estreñimiento.
Kiwi
Esta fruta contiene actinidina, una enzima que se encarga de descomponer las proteínas en aminoácidos, favoreciendo su asimilación. Su alto contenido en fibra y agua (casi un 90% de su composición) ayuda en la mejora del tránsito intestinal, por lo que es eficaz para combatir el estreñimiento, eliminar líquidos acumulados y bajar de peso.
Manzana
La manzana es una de las mejores aliadas para tu salud digestiva gracias a la pectina. Se trata de un tipo de fibra que se disuelve en agua y forma una mezcla viscosa en el estómago, hidratando las heces y suavizándolas para facilitar su salida y mejorar la flora intestinal, actuando como un laxante natural.
Rábanos
Los rábanos mejoran las digestiones gracias a su contenido en azufre, que ayuda a digerir la comida. Su alto contenido en agua lo convierte en un alimento recomendado en casos de estreñimiento, ya que interviene en la normalización de la flora intestinal.
Yogur
El yogur contiene probióticos que ayudan a mejorar la salud del organismo en muchos sentidos. Es especialmente bueno para el estómago, pues mejora los procesos digestivos y fortalece la flora intestinal.
Salsifí
El salsifí es la raíz comestible de una herbácea que crece abundantemente en las regiones mediterráneas. En la medicina tradicional se utiliza para abrir el apetito y mejorar las digestiones.