Comer fuera sin arruinar la dieta
Cuidar nuestro peso y disfrutar de una comida fuera de casa no es misión imposible. Lee y verás...
Cuidar nuestro peso y disfrutar de una comida fuera de casa no es una misión imposible. ¿Consejos? Vigilar las calorías y el tamaño de las raciones, lo primero. Pero sigue leyendo...
‘TUPPER’ EN LA OFICINA
Es un buen recurso para seguir un régimen: basta con que elabores tu dieta en casa y te ciñas a ella. Pero ¿quién no se cansa? Si un día decides llevarte un plato distinto al trabajo, sigue estas pautas: “Elige un primer plato de verdura (ensalada, crema, puré); un segundo de carne o pescado (la ración no debe superar la palma de tu mano) con una guarnición ligera (patata o verdura cocida); ¿la salsa?, light; como postre, un yogur desnatado o fruta de temporada. Y limita el consumo de pan (40 gramos por comida, y mejor integral”, explica la doctora Purificación Martínez de Icaya, de la Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad (SEEDO).
MENÚ DEL DÍA
La mayoría de los restaurantes ofrecen un menú del día de lunes a viernes, que suele ser la opción más económica para quienes comen en ellos. ¿Qué debes hacer si estás a dieta y un día sales a tomar un menú? “Si es un bufé libre, controla las cantidades (la oferta es tentadora y, en general, contiene demasiadas calorías); ¿pan? limítate a 40 g y repártelo durante toda la comida (no lo tomes al principio, para no abusar); antes de sentarte a comer, bebe agua (irás más saciada); en la comida, también, pero si no puedes eludir el alcohol toma sólo una copa de vino o cerveza; si un plato es muy graso, compénsalo con uno de ensalada (suelen ofrecerlas en los menús); combina siempre que puedas proteínas con verduras; evita los fritos y rebozados; de postre, mejor siempre fruta”.
COMER A LA CARTA
¿Un almuerzo de trabajo? ¿Has quedamos con esa amiga a la que hace un siglo que no ves? Tu dieta tampoco tiene por qué correr riesgo: “Muchas veces, la comida comienza con un plato para compartir que incluye varios alimentos y luego se elige un primero. Entonces, escoge el que menos calorías tenga (verdura, marisco); carne o pescado a la plancha o al horno como plato principal; ¿pan? ya sabes, 40 g para toda la comida (mejor integral); si tomas bebidas fermentadas, como vino, cerveza o sidra, bebe despacio, disfrutándolas, y de 1 a 2 copas para nosotras y de 2 a 3 para ellos, no más. ¿Respecto al postre? Date el gusto, pero opta por uno para compartir (media ración como máximo)”.
UNA OCASIÓN ESPECIAL
¡Una boda y tú a dieta! “Las celebraciones son situaciones excepcionales y hay que disfrutarlas. El mejor consejo que se puede dar es disfrutar con moderación”, dice la doctora. Y es que, ¿cómo vas a estar venga a contar calorías? Come con sentido común, relájate y olvídate de culpabilidades. Ya recuperarás poco a poco.
TOMAR EL APERITIVO
Peligro a la vista. Porque pocas cosas hay tan agradables como tapear con los amigos. ¿Algunos consejos? "Evidentemente, elige los aperitivos menos calóricos (marisco, encurtidos, banderillas); bebe agua para calmar la sed (el vino o el alcohol están hechos para disfrutarse; de estos, sólo 1-2 copas y, si se trata de cerveza, tómala sin alcohol); compensa luego en casa con una cena ligera, y haz del ejercicio físico un hábito diario".
Por Carmen Sabalete