Leptina, la hormona que adelgaza
Esta hormona es clave para nuestra calidad de vida y origina problemas como la obesidad.
Su nombre viene del griego ‘leptos’ (delgado). Así que imagínate lo importante que es a la hora de controlar el peso. Pero ¿qué sabemos de ella? ¿Podemos regularla de forma natural? ¡Averígualo!
¿Qué es la leptina?
“Una hormona que se origina principalmente en el tejido adiposo [la grasa] y llega al cerebro, concretamente al hipotálamo”, dice Inmaculada Canterla, experta en Nutrición y Medicina Antiaging. Siempre ‘de la mano’ de otra hormona, la insulina, que regula el azúcar en sangre, es clave para nuestra calidad de vida y problemas como la obesidad.
El control del peso. “Y, precisamente, mediante el apetito y a través de la termogénesis [la quema de calorías derivada del gasto energético del organismo] y otros procesos metabólicos”, agrega la experta. ¿A qué conduce esto? “A ingerir menos alimentos y, en definitiva, a una pérdida de grasa”, añade. Y es que cuando el proceso es correcto y las reservas grasas suficientes, la leptina estimula una zona del hipotálamo enviando una señal que informa de que existe tejido adiposo suficiente, que es "como traduce" que estamos saciadas y no necesitamos comer más. ¿La consecuencia? La reducción en la ingesta de alimentos.
De forma natural, cuidando nuestra dieta. “Cuando hacemos un régimen estricto, la leptina baja y, cuando hay sobrepeso, aumenta. En el primer caso dificulta adelgazar y en el segundo, debería adelgazar. El problema surge cuando se da una resistencia a ella. Por eso, no convienen las dietas extremas ni comer en exceso. Tener horarios regulares de comidas, aumentar las proteínas, que sacian y frenan la grelina (una hormona muy importante -lee más abajo las hormonas que intervienen-) ayuda”.
Además de la leptina, hay otras hormonas que afectan. Por ejemplo: la HCG (o la hormona del embarazo), que “promueve la movilización de las grasas durante la gestación”; la hormona del crecimiento, “relacionada con la capacidad para hacer perder peso, eliminar grasa localizada o aumentar la masa muscular”; la grelina, “que también controla el metabolismo y que se conoce como la hormona del hambre”.
Esta última es fundamental: “Se segrega por el estómago antes de las comidas y comienza a disminuir cuando se va llenando. Su mala regulación se relaciona con el aumento de peso a largo plazo, con el efecto yoyó tras hacer dieta y aumenta las ganas de alimentos más sabrosos”.
... provoca obesidad. “La ausencia de leptina generada por defectos genéticos deriva generalmente en obesidad mórbida [cuando se tiene más de 50 kg por encima del peso óptimo], que se podría regular con la administración de dicha hormona”, explica Canterla. Y lo mismo sucede con una persona sana que desarrolle una resistencia a esta hormona: se termina por inducir la obesidad”.
Por Vera Alder