Revista Mía

Aprende a Decir que No

No saber decir que no se convierte en una debilidad que nos impide ser felices. Creer que siempre tenemos que ayudar, temer el rechazo o los enfrentamientos, el sentimiento de culpabilidad, temor a perder...

No saber decir que no se convierte en una debilidad que nos impide ser felices. Creer que siempre tenemos que ayudar, temer el rechazo o los enfrentamientos, el sentimiento de culpabilidad, temor a perder oportunidades... Todo puede estar detrás de no saber decir que no a tiempo. Puede llegar a convertirse en una exigencia constante, incluso llegar a dejar de vivir nuestras vidas para 'ocuparnos' de satisfacer a los demás. Y lo peor es la frustración y tristeza que sentimos cuando postergamos nuestros deseos por satisfacer las demandas de los demás. Para evitarlo, sigue estos consejos:
-Ten claros tus compromisos, conócete a ti mismo y actúa con integridad. Antepón tus prioridades. Si lo que te proponen no tiene nada que ver con ello, recházalo.
-Valora tu tiempo. Decir no a algo te permite decir que sí a otras cosas que de verdad te importan. Si demuestras que valoras tu trabajo, tu tiempo y tus prioridades, te respetarán por ello.
-Si aceptas todo lo que te piden, no eres tú mismo: no evolucionas como persona.
-Si después de una negativa, tu relación como persona se deteriora, no era una relación sincera, sino interesada. No dejes que te chantajeen.
-Puedes ser generoso, pero sin abusos.
- Si no lo tienes claro, retrasa la decisión, di que lo tienes que pensar. Busca argumentos sólidos para poder aceptar la petición.
-Cuando digas que no a alguien, hazlo de forma educada pero firme. Demuestra que respetas sus sentimientos y opiniones.
-No inventes excusas, sino la situación se repetirá.
-Antes de aceptar, piensa en sus implicaciones. ¿Cuánto tiempo necesitas? ¿Cómo afectará a tu vida? ¿Qué otros proyectos tendrás que dejar a un lado para poder cumplir con los demás?
tracking