Piernas cansadas
Afecta a muchas mujeres y sus causas son variadas. Te explicamos cómo reducir y evitar esta molesta sensación.
La pesadez de piernas es un problema que afecta a un 80% de mujeres. Sus síntomas son variados, desde el dolor general, sensación de cansancio, calambres, hinchazón... Si sueles sufrir estas molestias, apunta nuestros consejos para prevenirlas y reducirlas.
¿Por qué se produce?
Una de las causas más comunes es la insuficiencia venosa crónica. Este transtorno, benigno y controlable, se produce porque las venas pierden elasticidad y sus válvulas (que controlan el flujo de sangre) no cierran bien, provocando que la sangre se quede acumulada en las piernas. Así, pasa líquido a los tejidos y se producen edemas (inflamación).
Otras causas
Las cambios hormonales durante el ciclo menstrual y el embarazo también pueden provocar estas molestias. El sedentarismo, una dieta con exceso de sodio y el calor agudizan los síntomas.
“La mejor forma de evitar el dolor es mover las piernas constantemente, sin parar, porque éste reaparece enseguida cuando están en reposo. El problema es que esto no es compatible con el descanso nocturno”, dice el neurofisiólogo Jesús Escribá Alepuz, de Valencia, miembro de Topdoctors.es. Por eso, aplícate geles fríos (de los tobillos a las rodillas, mediante movimientos circulares para activar el retorno) o pásate la ducha de agua fría por ellas.
Las plantas como el ginkgo biloba aumentan el grosor de las paredes venosas, con lo que éstas tienen más capacidad para impulsar la sangre hacia arriba. Lo puedes tomar líquido (15 gotas/3 veces al día) o en comprimidos.
Si quieres evitar los síntomas de la pesadez no permanezcas quieto (de pie o sentado) mucho tiempo, coloca las piernas arriba siempre que puedas, bebe agua para eliminar líquidos y huye de la ropa demasiado ceñida y del calor.