5 cenas que relajan

La propuesta: Ensalada de lechuga romana, queso mozarela bajo en grasa, pechuga de pollo y cubitos de calabaza aderezado con vinagreta. Hazla con zumo de limón, miel, germen de trigo y aceite de oliva extra virgen. ¿Y como punto final? Toma un vaso de leche desnatada.
Sus bondades: Esta cena aporta nutrientes que facilitan el relax y además los peptidos derivados de las proteínas de la leche facilitan la somnolencia.

La propuesta: Lubina a la plancha en cama de espinacas con crema de queso bajo en grasa y almendras, un plátano y una infusión de melisa.
Sus bondades: Contien triptófano, magnesio y potasio y vitaminas que propician el descanso", dice Laura Parada, nutricionista de Slow Life House.

La propuesta: tortilla francesa rellena de setas con ensalada de aguacate, lechuga, semillas de calabaza y lentejas + yogur desnatado + infusión de espino albar.
Sus bondades: La combinación de vitamina D, triptofano y calcio actúa sobre el sistema nervioso y estimulan la liberación de melatonina y serotonina, las hormonas del relax y el bienestar.

La propuesta: cenar bien para domir mejor ¿Qué puedes tomar? Tosta de pan de avena, pechuga de pavo, cebollas pochadas en aceite de oliva acompañado con un zumo de cerezas:
Sus bondades: las cerezas contienen melatonina, triptófano y serotonina, según un estudio del grupo de investigación en Neuroinmunofisiología y Crononutrición de la Universidad de Extremadura. Estos compuestos, junto a los que posee la tosta, mejoran el ciclo del sueño.

La propuesta: Wok de Arroz integral con brócoli, pollo, jengibre y semillas de sésamo + aguacate aliñado.
Sus bondades: Contiene sustancias como triptófano, magnesio, potasio y vitamina D, B1 y B6, que juegan un papel muy importante en los procesos del sueño y relajación, ya que por sus propiedades actúan sobre el sistema nervioso.