Ingredientes que puedes usar como conservantes naturales de los alimentos
Estas son algunas de las alternativas naturales que existen a los conservantes de origen químico que se usan para alargar la vida de los alimentos.
Hay muchas maneras de conservar los alimentos. Una de ellas es la aplicación de conservantes químicos, técnica muy usada en la industria alimentaria desde hace años. Asimismo existen determinadas fórmulas para alargar la vida de diferentes alimentos como son los procesos de congelación, refrigeración, pasteurización o deshidratación. Sin embargo, a menudo olvidamos que todo esto es mucho más sencillo y a veces podemos preservar nuestros alimentos con ciertos ingredientes básicos que todos tenemos.
Ciertos alimentos como las carnes no pueden mantenerse frescos por mucho tiempo y con el paso de los días se van poniendo malos. Tener que tirar la comida da muchísima rabia, así que es importante buscar fórmulas para que nos duren un poquito más en la nevera (y por supuesto, aprender a guardarlos correctamente). Para ello, no tenemos por qué recurrir a fórmulas complejas ni a productos difíciles de encontrar cuyos nombres comienzan por 'E' (como sucede en el caso de los productos procesados), sino ingredientes más de 'andar por casa' que estamos seguras de que tienes en la tuya.
¿Entre ellos? la sal, el azúcar, el limón, las especias o el vinagre, que además de dar sabor a nuestras comidas también nos ayudan a conservarlas si sabemos cómo aplicarlos de manera adecuada (haciendo adobos, por ejemplo). Estos ingredientes evitan la proliferación de moho, bacterias indeseadas y otros organismos que estropean la comida. Los ingredientes de origen natural llevan siglos usándose para preservar los alimentos y alargar un poco su vida, y aunque han sido sustituidos en muchísimas ocasiones por los artificiales (de hecho, la mayoría de los alimentos que comemos a diario se tratan con aditivos y conservantes químicos), hoy queremos reivindicar su uso en la cocina.
Los conservantes químicos no son perjudiciales en pequeñas cantidades. La doctora Nogués, responsable de la Unidad de Nutrición del Centro Médico Teknon, asegura que “los conservantes son totalmente necesarios e imprescindibles para poder disponer de alimentos durante largos períodos” y que podemos estar tranquilos sobre las normas que los regulan ya que son estrictas para que estos conservantes no afecten negativamente a la salud.
Sin embargo, siempre viene bien estar al tanto de cuáles son las alternativas de las que disponemos. Si quieres pasarte a una cocina más natural, sigue leyendo cuáles son los conservantes naturales que puedes usar para que tus alimentos se mantengan en buen estado durante más tiempo.

Además de potenciar el sabor de los alimentos, el limón también puede usarse para conservarlos. Este ingrediente acidifica el medio retrasando así el crecimiento de las bacterias y los microorganismos que hacen que la comida se estropee. Añade unas gotitas al tofu, a unas verduras asadas o una salsa de tomate y te durarán un poquito más.

El romero es rico en polifenoles, que son compuestos químicos de origen natural y con gran poder antioxidante. Se utiliza para retener el color y el sabor. Esta manera de preservar los alimentos no es demasiado duradera, pero sí nos servirá si queremos conservarlos durante periodos de tiempo muy cortos o de un día para otro.

Según un estudio de la Universidad Politécnica de Cataluña y de la Universidad de Barcelona, la cebolla es una estupenda alternativa natural a los conservantes artificiales de los alimentos. Dicho estudio comprobó que los flavonoides presentes en ella (especialmente en la variedad amarilla) alargan la vida de los alimentos.

El ajo tiene propiedades antivirales, por lo que es muy bueno combatiendo las bacterias de los alimentos. Para beneficiarte de estas propiedades solo tienes que picar un poco de ajo y añadirlo en salsas, aderezos, sopas o platos donde quieras mantener a las bacterias dañinas alejadas.

El azúcar se utiliza para evitar que las bacterias y los microorganismos campen a sus anchas por los alimentos y aceleren su deterioro. Al igual que la sal, lo que hace es absorber el líquido de los alimentos para así deshidratarlos garantizando una óptima conservación. Se trata de un ingrediente dulce, así que mejor utilízalo en frutas.

La sal se considera uno de los mejores conservantes naturales que existen. Se emplea para conservar sobre todo productos cárnicos, a los que protege frente a los mohos y bacterias mediante la deshidratación, ya que absorbe todo el líquido. Para que funcione hay que usarlo generosamente.

Es muy bueno como preservante natural ya que es el resultado de la fermentación de las soluciones de agua y azúcar. El vinagre contiene ácido acético, que mata los microbios que aceleran el deterioro de los alimentos. Con él se elabora la salmuera, utilizada para conservar frutas y vegetales.

Aunque no es tan eficaz como la sal o el vinagre, el clavo puede ser un buen conservante de tus alimentos, pues ayuda a reducir el crecimiento de bacterias y hongos. Se utiliza sobre todo para preservar encurtidos y conservas caseras. Añade 3 o 4 clavos de olor un poco machacados a verduras asadas, salsas o cualquier cosa que quieras conservar.