Revista Mía

¿Fan de las conservas? Hazlas esterilizando tus frascos

Si eres una apasionada de preparar mermeladas y salsas caseras, has de saber que la esterilización de los frascos es un paso clave para que las conservas se mantengan en buen estado y su consumo sea seguro. Te enseñamos cómo hacerlo.

Una mermelada o una salsa de tomate hecha en casa con nuestras propias manos (y mucho amor) sabe mejor que cualquiera que podamos encontrar ya elaborada, en eso estamos todas de acuerdo… Seguro. Y aunque disfrutar de los alimentos homemade es una de las cosas más gratificantes que existen, también es imprescindible mantener el orden y la limpieza antes, durante y después del proceso. Si eres aficionada a preparar conservas en casa, sabrás que la esterilización de esos frasquitos de cristal tan monos tienen que ser cuidadosamente limpiados y desinfectados antes.

Para empezar, es vital asegurarse de que nuestros frascos de vidrio estén escrupulosamente limpios para que el contenido no se pierda, bien sea mermelada, chutney o cualquier tipo de salsa o confitura casera. Es vital que estén impolutos para evitar también posibles intoxicaciones alimentarias y asegurar su correcta conservación para ser utilizados más adelante sin ningún riesgo. Te enseñamos cómo esterilizar tus frascos o botes para que guardes en ellos tus conservas favoritas. ¡No te saltes ningún paso!

Cómo esterilizar tus frascos de vidrio

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vegetales en conserva en frascos de vidrio

Paso 1

Calienta el horno a un ventilador a unos 120 o 140º con la opción del ventilador. Lava  a conciencia los frascos con agua caliente y jabón y luego enjuágalos bien para que no quede rastro de espuma. Coloca los frascos en una bandeja para hornear y ponlos en el horno para que se sequen por completo. Si usa frascos con goma en el borde, mejor hierve los sellos de goma aparte, ya que el calor seco los daña. También es muy recomendable esterilizar los utensilios y cubiertos que hayas podido utilizar en el proceso.

Otra opción es dejar que sequen al aire, boca abajo sobre un paño o trapo, pero utilizando el horno te asegurarás de que terminen 100% secos.

Paso 2

Vierte el contenido en los frascos y hazlo bien para eliminar las burbujas de aire. Si has preparado mermelada o chutney, es importante que la mezcla esté todavía caliente en el momento de llenar los frascos.

Paso 3

Es aquí donde se produce la segunda esterilización de los botes, cuando ya hayas preparado la conserva e introducido el alimento en cuestión en el frasco. Así, introduce de nuevo los tarros sin cerrar en una olla y cúbrelos con agua dos tercios. Deja que se cuezan durante unos 5 o 10 minutos, tomando la precaución de que no entre agua en la conserva, ya que si no puede estropearse y es lo último que deseamos. Transcurrido este tiempo es el momento de cerrar los tarros, añadir agua hasta el borde y dejar que se ‘cocinen’ a fuego lento durante 20 minutos.

Paso 4

Por último, retíralos y déjalos enfriar sobre un trapo. Una vez hayan perdido temperatura, etiquétalos indicando qué tipo de conserva es y la fecha en la que se hicieron para evitar cualquier riesgo. Las conservas son ideales (si se hacen tomando esta serie de precauciones) para entregar como detalle a familiares y amigos, así que puedes hacer que su aspecto sea mucho más cute cubriendo la tapa con alguna tela bonita, creando etiquetas con algún detalle o colocando algún lacito alrededor. Y tú, ¿te animas a preparar tus propias conservas?

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