Descubre cómo limpiar un abrigo de plumas con estos sencillos pasos
Te explicamos cómo limpiar un abrigo de plumas sin complicaciones con este eficaz método.
Los abrigos de plumas o plumíferos proporcionan una excelente protección contra el frío, ya que las plumas son un aislante natural que ayuda a retener el calor corporal mientras que su ligereza lo hace cómodo de llevar y no agrega peso adicional innecesario. En definitiva, los plumíferos son una excelente opción para aquellos que buscan una prenda cálida y confortable para el invierno. No cabe duda, de que se trata del artículo ideal contra el frío. Sin embargo, bien es cierto que es una prenda un tanto complicada a la hora de lavar. Por ello, te explicamos cómo hacerlo a través de una forma sencilla que te proporcionará un gran resultado.
Para que se mantengan limpios y como nuevos, es necesario lavarlos con delicadeza, es decir, evitando que su relleno acolchado se aplaste o deforme. No es una labor complicada, solo debes seguir estos sencillos pasos:
- A la hora de lavar un plumífero es imprescindible leer la etiqueta de la prenda para saber exactamente la temperatura y el tiempo de lavado que necesita, así como instrucciones específicas que debas seguir.
- Prepara el abrigo para lavar: Si el abrigo tiene manchas visibles, intenta limpiarlas con un trapo húmedo antes de lavarlo. Luego, cierra todas las cremalleras y botones para evitar que se enreden durante el lavado.
- Utiliza un detergente suave: Usa un detergente suave, preferiblemente uno que esté diseñado específicamente para prendas delicadas. Evita los detergentes con blanqueador o suavizante de telas, ya que pueden dañar las plumas.
- Lava a mano o en lavadora: Si el abrigo es muy grande, es posible que debas llevarlo a una lavandería profesional. Si decides lavarlo en casa, utiliza una lavadora de carga frontal y selecciona el ciclo de lavado delicado y agua fría. También puedes lavarlo a mano en un lavabo o tina con agua fría y detergente suave.
- Seca el abrigo: No seques el abrigo en la secadora, ya que el calor puede dañar las plumas. En su lugar, cuélgalo en un lugar bien ventilado para que se seque al aire libre. Asegúrate de agitar el abrigo de vez en cuando mientras se seca para evitar que las plumas se agrupen.
- Desenreda las plumas: Una vez que el abrigo esté seco, es posible que las plumas se hayan agrupado en algunas áreas. Usa tus manos para desenredar suavemente las plumas y devolver el volumen al abrigo.
- Recuerda que lavar un abrigo de plumas puede ser un proceso delicado y es importante seguir las instrucciones de cuidado específicas de la prenda. Si no estás seguro, siempre es mejor llevar el abrigo a una lavandería profesional.
Una vez seca, puedes guardarla colgada en el armario, o doblada por las costuras, pero sin colocar encima ningún peso ya que perderá su forma y, por tanto su función aislante.