Álex Gonzalo Cordobés confesaba que desde pequeño siente amor por la repostería. Con apenas cinco años viajaba a Stockport, cerca de Mánchester, a ver a su abuela. Allí, un familiar tenía una pequeña pastelería y tanto a él como a su hermano le encantaba pasar las horas allí ayudando en lo que le dejaran.
Quizá fue ese recuerdo lo que le hizo dejar la clínica de fisioterapia donde trabajaba con su abuelo para perseguir su sueño y convertirse en repostero. Lo que no imaginaba es que centrarse en su pequeño negocio le haría tan famoso que ahora sus tartas de queso son las más virales de Instagram.
Este madrileño comenzó como comenzaban las empresas tecnológicas de Silicon Valley, en un garaje. Como si de Apple se tratase, Álex hacía hace apenas dos años sus maravillosas tartas de queso en el garaje de sus padres y ahora las recomiendan chefs tan prestigiosos y mediáticos como Samantha Vallejo-Nágera.
Dónde podemos comprar la tarta de queso con más seguidores de Instagram
Fue gracias a las redes sociales que su negocio se dio a conocer cuando futbolistas como Lucas Vázquez o Álvaro Arbeloa compartieron sus creaciones en Instagram. Luego abrió su primer local en Las Rozas (Burgocentro 1) y ahora, en pleno barrio de Salamanca, en la calle Velázquez 60, su apertura más deseada en Madrid.
Las mejores tartas de queso de Madrid
Su lema es “la cremosidad no se negocia”, y solo viendo las fotos nos hacemos una idea de que las tartas de queso de Álex Cordobés tienen un estilo a la clásica tarta de la Viña. Usa huevos de gallinas en libertad de Cobardes y Gallinas, y para los diferentes quesos, nata y mantequilla apuesta por proveedores de cercanía, pequeños y con alma. Pero además de poder probar la clásica tarta de queso, su tarta de chocolate y queso o una tarta de Lotus, tienen especialidades tan originales como una tarta de Maltesers con base de gofre.
También hay espacio para la innovación más interesante gastronómicamente hablando, por ejemplo con esta tarta de queso y sobrasada con un toque salado, que usa sobrasada de Mallorca de la marca Can Company y queso Olavidia, elegido campeón del mundo en los World Cheese Awards de 2021.
Si esto no es pecado, desde luego lo parece, y lo mejor es que tampoco tiene un precio por las nubes. Porciones individuales desde seis euros y tartas completas por 32 euros. Y una cosa es clara: merece cada euro porque están deliciosas.