María de los Ángeles Rozalén Ortuño, nacida el 12 de junio de 1986 y conocida en España como Rozalén, es una cantante y compositora que fusiona a la perfección el pop, el folk y los ritmos tradicionales.
Rozalén hizo su debut en 2013 con su álbum Con derecho a... y, desde entonces, ha logrado ser una de las artistas más queridas y admiradas en España. Temas como 80 veces o Comiéndote a besos se han convertido en himnos para la generación millennial.
Dani Martínez recibirá a Rozalén, Jordi Roca y Malena Alterio en #MartínezYHermanos 👏 ¡La noche promete! 👏 A las 22:50h 📺 https://t.co/R63TPcKxdI pic.twitter.com/v2jQZ187i8
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La albaceteña visitó el programa Martínez y Hermanos junto al chef Jordi Roca y la actriz Malena Alterio. Durante la parte de la entrevista en la que hablaron de los típicos momentos "tierra, trágame", Malena recordó su época haciendo bolos en Valencia, cuando todos la reconocían por su papel en Aquí no hay quien viva.
La ganadora de un Goya a Mejor Actriz por Que nadie duerma relató cómo un hombre con muchos cinturones la llevó en un descapotable hasta una discoteca situada en una gran explanada llena de coches tuneados. "Vinieron dos tipos enormes a custodiarme, y yo pensaba '¿dónde me habéis traído?', con gente borracha y otras cosas... Y todos decían, 'Belén, hazte una foto'", comentó la actriz. Al subir al escenario, solo pudo decir: "Buenas noches, un poquito de por favor".
Malena siempre tan icónica 😂😂😂
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Al ver que no encajaba en ese tipo de eventos pero tenía que cumplir con un contrato, Malena decidió llevarse al resto de bolos a su compañero Edu Gómez, fallecido el 28 de julio de 2019 en Madrid.
Un concierto accidentado
Rozalén también quiso confesar uno de sus momentos más vergonzosos. Estaba bastante nerviosa porque iba a cantar por primera vez junto a Bebe, una de sus artistas favoritas. Antes del concierto, se cruzó con el productor Carlos Jean y la ansiedad la invadió. Llevaba una bufanda-manta y, debido a los nervios, comenzó a envolvérsela por todo el cuerpo. Cuanto más intentaba liberarse, más atrapada quedaba entre tanta tela.
"Intenté quitarme la bufanda, pero en lugar de eso, la fui liando más", relataba entre risas. Finalmente, cuando logró quitársela, se acercó al productor y le dijo: "Hola, soy Bebe". Nunca le volvió a pasar algo parecido y, aunque reconoce que "fue absurdo", ahora se ríe al recordar esa noche en la que casi se ahoga con su propia bufanda dos minutos antes de decirle a uno de los productores más famosos que ella era Bebe.