Aunque ya no aparece en los lineales, el suavizante Dulzzia sigue en la memoria de muchos clientes de Mercadona. Su aroma característico y su buena relación calidad-precio lo convirtieron durante meses en uno de los productos más buscados del supermercado. Pero en abril de 2024, la cadena valenciana decidió retirarlo como parte de una renovación de su surtido de limpieza. En su lugar, han llegado nuevas fórmulas, también bajo la marca Bosque Verde, con nombres como Colonia o Frescor Azul, que prometen efectos muy similares: perfumes duraderos y fragancias envolventes que permanecen lavado tras lavado.
Detrás de todos ellos, sin embargo, no hay ninguna gran marca conocida del sector como Flor o Mimosín, sino una empresa con sede en Guareña (Badajoz) que lleva años fabricando estos productos de forma discreta: Inquiba S.A. Una compañía especializada en productos para el hogar que trabaja tanto para Mercadona como para otras cadenas nacionales e internacionales.
Una fábrica discreta pero fundamental
Inquiba (Industrias Químicas de Badajoz) fue fundada en 1970 y, desde entonces, ha crecido hasta convertirse en una de las principales fabricantes de productos de limpieza en España. En 2020, su facturación superó los 130 millones de euros y su plantilla rebasaba los 350 trabajadores. Aunque su nombre no aparece en el etiquetado final de los productos, su firma está presente en millones de hogares españoles a través de suavizantes, detergentes y limpiadores de marca blanca.
Su especialidad es ofrecer soluciones adaptadas a las necesidades de cada cadena de distribución: formulaciones personalizadas, aromas específicos y formatos optimizados. En el caso de Mercadona, los suavizantes de Bosque Verde que fabrica Inquiba siguen una misma línea: envases de 2 litros, promesa de hasta 80 lavados por botella, ingredientes biodegradables, envases reciclables y ausencia de ensayos en animales. Todo ello a un precio contenido, generalmente por debajo de los 2 euros, lo que les permite competir de tú a tú con las marcas más consolidadas del mercado.
La vida después del Dulzzia
El hueco dejado por Dulzzia no ha quedado vacío. Productos como el nuevo suavizante Colonia han heredado sus características principales: intensidad aromática, alto rendimiento y una imagen cuidada. Aunque los clientes más fieles al anterior producto puedan notar diferencias, Mercadona ha logrado mantener el interés del consumidor apostando por nuevos perfumes y manteniendo el equilibrio entre calidad y precio.
En este contexto, el papel de Inquiba ha sido clave. Su capacidad para renovar fórmulas con rapidez y ajustar la producción a la demanda del distribuidor le ha permitido mantenerse como proveedor de referencia para Mercadona incluso en tiempos de reajuste de surtido.
El futuro de los suavizantes de marca blanca
Con la desaparición del Dulzzia, Mercadona ha demostrado una vez más su estrategia de ajuste continuo de productos. Los cambios responden a estudios internos de demanda, a la evolución del mercado y, en muchos casos, a decisiones logísticas que afectan a toda la gama de limpieza. Lo que no cambia es la apuesta por mantener la producción nacional y colaborar con empresas que pueden ofrecer un producto competitivo, eficaz y alineado con las tendencias de consumo.
Por eso, mientras en los envases seguimos viendo el nombre de Bosque Verde, lo que hay detrás es el trabajo de una industria química española que, sin hacer ruido, ha logrado colocar sus productos en millones de cestas de la compra cada mes. Y que, al margen de las modas, seguirá fabricando suavizantes que huelen a limpio, duren lo que duren las fragancias.
