El último capítulo de 'Hermanos' dejó al público infartado. Tolga llegó al despacho de Akif en el momento en el que Bahar y Emel estan reproduciendo el vídeo de la muerte de Leyla. Por fortuna, el joven no llega a verlo, pero Ogulcan sí.
Al día siguiente, el chico se enfrenta a Süse y le reprocha que no dijese que ella estuvo involucrada en la caída por las escaleras que le provocó la muerte a la chica. Ogulcan le pregunta a Süse por qué discutía con Leyla antes de la muerte de esta, pero la chica se niega a decirle la verdad.
Ogulcan está a punto de contarle lo que ha descubierto a Tolga, pero, para tranquilidad de Süse, se arrepiente en el último momento, pues no quiere que su amigo cometa una locura para vengar el fallecimiento de su hermana.
Süse le agradece a Ogulcan que haya decidido callarse, pero él le deja claro que no lo hace por ella. La tensión entre los dos aumenta, es visible y Ömer se da cuenta de que algo pasa. Ogulcan se niega a decirle a su primo por qué no tolera la presencia de Süse y su pequeño abismo se abre entre los dos.
Por otro lado, la llegada de Elif a casa de Ayla no está siendo muy fácil. Berk no soporta la presencia de una extraña en su mansión y así se lo dice a Aybiké. Esta, consciente del parentesco que une a su novio y la recién aparecida, trata de mediar entre ambos y le pide a Berk que le dé una oportunidad a Elif. «Deberías entenderla. Acaba de perder a su madre y no tiene a nadie más en este mundo. Necesita algo de tiempo y de cariño», le explica Aybiké al joven.
Mientras tanto, Akif se pone manos a la obra para reconquistar a Nebahat y ganarse su perdón. Los encantos del hombre hacen efecto en la mujer, que termina por darle una segunda oportunidad a su exmarido.
Por otra parte, Sevval se queda sin dinero y la echan del hotel. Desesperada, recurre a sus hijos, quienes le abren las puertas del hogar familiar. Por respeto a sus vástagos, Ahmet decide que Sevval viva de nuevo con ellos hasta que encuentre una casa.
A su vez, Sarp tiene un encontronazo con Orhan en el colegio. El chico paga a uno de los empleados de la escuela para que meta en la taquilla del hombre varias tablets y portátiles. Después, le acusa de haber robado material escolar: «Yo he visto que se llevaba varios objetos». El director del colegio no tiene más remedio que despedir a Orhan de su puesto.
