Los árboles se empiezan a teñir de tonos cálidos, los paraguas se preparan para su temporada más activa y la ropa de entretiempo vuelve a tomar protagonismo. El final del verano trae cambios y la cocina no iba a quedar exenta de su efecto. Hoy te presentamos una receta original, nutritiva y deliciosa perfecta para recibir la nueva temporada de otoño.
Ingredientes
600 g de setas • 15 g de
setas deshidratadas • 1 cebolla mediana
• 120 ml de vino blanco • vinagre
• 2 cucharadas de estragón • 2 cucharadas
de perejil picado • sal • pimienta negra
• aceite de oliva.
Preparación
- Pon las setas secas en remojo durante 30 minutos. Mientras, limpia y trocea las frescas más grandes.
- En una cazuela mediana, calienta una cucharada de aceite, añade un puñado de setas y deja 2 minutos sin remover. Cuando cojan color, dales la vuelta y déjalas un minuto más. Repite la operación con todas.
- Pela y corta la cebolla y añádela a la misma cazuela. Saltea durante 5 minutos. Añade el vino y dale un hervor durante 1 minuto.
- Escurre las setas secas ya hidratadas y vierte el agua del remojo colada en una cazuela. Añade también 500 ml de agua, el tomillo, el perejil, el estragón y una pizca de sal. Deja hervir a fuego lento durante 20 minutos, hasta que quede la
- mitad del líquido.
