Imagina esta situación: estás de excursión / en una casa raural con tu familia y tienes una lata de conserva para un picoteo rápido antes de la cena. Vas a por el abrelatas y... ¡Socorro! No tienes. Con este truco, si tienes una cuchara, tienes el problema resuelto.
Aunque parece algo muy evidente, en solo 5 meses el vídeo ha conseguido más de 4 millones de visualizaciones. Cuando estés en una cocina que no es tuya, puede ser un truco muy útil.