La menopausia marca el inicio de una serie de transformaciones hormonales que pueden tener un impacto significativo en el bienestar femenino. Según CLINICAPLANAS: "Las hormonas que intervienen en la menopausia son las hormonas sexuales producidas por los ovarios. Estas vienen del colesterol y se producen porque hay unas hormonas en la hipófisis que estimulan el ovario para que las produzca, porque el ovario no es solo una glándula que produce la ovulación, sino también las hormonas sexuales".
Las Protagonistas del Cambio Hormonal
En el escenario de la menopausia, las hormonas sexuales producidas por los ovarios son las estrellas principales. Estas hormonas, derivadas del colesterol, son instigadas por señales de la hipófisis, una pequeña glándula en el cerebro que actúa como directora de la producción hormonal ovárica. A continuación os explicamos qué cambios se producen hormonalmente durante esta etapa de la mano de CLINICAPLANAS:
Estrógeno
Si te encuentras lidiando con fatiga, signos evidentes de envejecimiento, sequedad vaginal o esos sofocos que te hacen desear un clima más fresco, la hormona del estrógeno podría ser la culpable. Esta hormona desempeña un papel crucial en la salud vaginal, actuando como el abono necesario para mantenerla en óptimas condiciones. La falta de estrógeno durante la menopausia puede conducir a sequedad, molestias durante las relaciones sexuales y alteraciones en la excitación y otras fases de la respuesta sexual.
Progesterona
Si experimentas irritabilidad, cambios de humor, problemas de sueño ligero o ansiedad durante la menopausia, la progesterona es la hormona detrás de esos altibajos emocionales. Además, desequilibrios en esta hormona suelen manifestarse en dolor en los senos. En resumen, la falta de progesterona durante la menopausia tiene un impacto particularmente fuerte en las alteraciones del estado de ánimo.
Testosterona
A menudo olvidada en las conversaciones sobre la menopausia, la testosterona también juega un papel crucial en este período. Su déficit puede llevar a la pérdida de tono muscular, aumento del vientre y cambios en la distribución de la grasa corporal. Además, la testosterona influye en el deseo sexual, aportando vitalidad y fuerza, lo que mejora la libido.
El Descenso Hormonal
Durante la menopausia, las hormonas (estrógeno, progesterona y testosterona) experimentan un descenso radical. Sin embargo, aquí radica la contradicción intrigante: mientras que los niveles de hormonas ováricas disminuyen, las hormonas estimulantes aumentan. La hipófisis, como una directora desesperada por un último acto estelar, aumenta la producción de hormonas para instigar una reacción ovárica. Pero, aunque se estimule vigorosamente, el ovario, agotado, no responde y deja de segregar más hormonas.
En este complejo baile hormonal de la menopausia, entender las sutilezas de estrógeno, progesterona y testosterona se vuelve esencial. Comprender estos cambios puede ser la clave para disfrutar de esta fase de la vida, abrazando no solo la transformación física, sino también manteniendo un equilibrio emocional. La menopausia, lejos de ser un cierre, puede ser el inicio de un capítulo renovado de bienestar y autoconocimiento para todas las mujeres.