La relación entre William Levy y Elizabeth Gutiérrez podría estar atravesando de nuevo un momento difícil, pese a que a finales de 2023 intentaron desmentir los rumores de un distanciamiento.
Los fans del actor han visto que la pareja ha dejado de seguirse en redes sociales, dejando ver que la relación del cubano con su pareja podría haber terminado.
Ajeno a esos rumores, Levy ha querido compartir sus secretos para mantenerse en forma, sus rutinas deportivas o los alimentos que evita.
También ha comentado las diferencias entre su último proyecto en España, la serie de Movistar Plus+ Montecristo, o las diferentes telenovelas que ha hecho en su carrera.
"En Miami tengo una cancha de baloncesto en casa y juego con mi hijo y mis amigos. También me encanta irme a pescar porque nací en Cojimar, un pueblito de pescadores, y me crié con ellos. Cada vez que puedo me escapo porque me relaja mucho", desvela el cubano sobre el deporte que hace.
Para controlar su dieta y comer casi de lo que él quiera explica que "trato de hacer ejercicio, pero me he dado cuenta de que no como cosas que engorden mucho como arroz o pasta, que no me gustan. Pero como mucha carne, pescado, marisco... También ensaladas, frijoles o yuca".
Levy también es consciente de la fama y de la pasión de las fans, que lleva con mucha humildad "porque es algo muy bonito, significa que estás teniendo éxito y que lo estás haciendo bien".
Además, reconoce que "si te lo tomas de otra forma, no te mereces el éxito. Recuerdo a personas que se han acercado no solo para hacerse una foto, sino para decirme que alguno de mis personajes le ha cambiado la vida o les ha ayudado a pasar un momento difícil de su vida, y eso es lo más bonito", confiesa
Respecto a las diferencias de rodar una serie diaria como son las telenovelas a una con una trama cerrada y semanal, el actor asegura que "en Montecristo tuve más tiempo para llevar a cabo mi trabajo, ya que, como mucho, hacíamos siete escenas en un día, llevando un nivel de producción mejor".
Mientras que "grabar una telenovela es muy difícil, agotador. En una novela hay que grabar unas 35 escenas al día y es muy cansado", admite.
