La icónica cantante Britney Spears ha vuelto a ser noticia, esta vez por compartir un video en el que aparece desnuda en la playa, realizando movimientos sugerentes. Esta acción ha generado alarma entre sus fans, quienes se muestran preocupados por el estado emocional de la artista.
Britney Spears ha visto cómo varias webs se han hecho eco de su contenido, recibiendo muchas críticas de los cibernautas. La actriz ha manifestado que estos comentarios le afectan de forma física. En una publicación reciente, afirmó que el bullying que ha sufrido en redes durante años, le ha generado un daño en el lado derecho del cuerpo, afectación que incluso le impide pensar adecuadamente en ocasiones.

Desde el fin de la tutela de su padre en 2021, que duró 13 años y restringió considerablemente su libertad, Britney ha estado en el centro de la atención mediática. La liberación legal de Spears fue celebrada con gran entusiasmo tanto por ella como por sus seguidores. Sus poses desnudas en redes fueron interpretadas como un liberación por parte de sus fans, ahora la conducta de Britney es cada vez más preocupante.
Tras recuperar su autonomía, Britney comenzó a publicar videos en los que aparecía bailando o posando casi sin ropa, lo que al principio fue visto como una expresión de libertad después de años de restricciones severas. Sin embargo, la frecuencia de estas publicaciones, junto con otros contenidos inquietantes, ha suscitado preocupación sobre la salud mental de la cantante, especialmente después del último incidente en un hotel de Los Ángeles.

La cantante apareció semidesnuda a la puerta del hotel donde estaba alojada en Los Ángeles, después de haber tenido una gran bronca con su nuevo novio. Los empleados del hotel comentaron que su conducta fue agresiva con ellos y se vieron obligados a llamar a las fuerzas de seguridad por temor a que la situación se descontrolara.
En las imágenes del momento puede apreciarse como Britney aparece parcialmente cubierta tan solo con una manta y una almohada, cuando se encuentra en la vía pública expuesta a las miradas y a las fotografías de cualquier viandante.

El nuevo novio, ex delicuente, maneja el dinero
Medios estadounidenses han informado que tras su divorcio de Sam Asghari, Britney Spears está atravesando un período turbulento en su vida personal. Según estos informes, Spears continúa consumiendo drogas y alcohol, y su actual pareja, Paul Richard Soliz, está a cargo de manejar su dinero. Además, se ha dicho que la cantante experimenta cambios de humor extremos y ataques de ira que a veces culminan en violencia física.

La artista está compartiendo su vida con Paul Soliz, un hombre que tiene a sus espaldas un amplio historial delictivo. En 2004 fue detenido por posesión y venta de drogas y condenado a cuatro años de cárcel. En 2019 fue detenido de nuevo por un escándalo de orden público y un año después le volvieron a detener por posesión de armas.
La situación es preocupante, ya que diversos informes sugieren que, en ocasiones, es imposible comunicarse racionalmente con Britney, ya que reacciona de forma violenta, debido presuntamente a las sustancias que consume. Varios usuarios han lamentado la situación de la "princesa del pop", señalando que, a pesar de haberlo tenido todo, ahora parece estar sola y necesitar ayuda.
"Qué triste ver eso, una mujer que lo tuvo todo y más. Ahora su forma de actuar es característica de alguien vacío, al que su familia ha dado la espalda. Necesita ayuda," comentó un usuario, reflejando el sentimiento generalizado entre los seguidores de la artista.