El primer paso para diseñar nuestro jardín vertical es decidir qué plantas incluir. En teoría, se puede usar cualquier tipo de planta siempre que esté garantizada la aportación de nutrientes. Sin embargo, es mejor apostar por especies que se adapten bien a la inclinación. Entre ellas, las plantas trepadoras son ideales, ya que de forma natural se desarrollan en un espacio vertical.
La Tulbaghia violácea también es una excelente opción. Se la conoce como ajo de jardín y es originaria del sur de África. Crece rápidamente en climas cálidos y florece durante el verano y parte del otoño. Las flores moradas desprenden un agradable aroma. Para su crecimiento, necesitan estar expuestas a la luz del sol. En cuanto al riego, no requieren gran cantidad de agua ni de abono. De hecho, son capaces de sobrevivir durante largo tiempo sin el vital líquido y son perfectas para un jardín vertical exterior.
Otra de las especies por las que puedes optar es la Platycerium bifurcatum. Es un helecho que necesita de otra planta para crecer, ya que su raíz es tan débil que necesita de otra que la sostenga, aunque las hojas son las que crecen a modo de trepadoras. No sobreviven a climas donde no se alcancen los 15 grados. Por su parte, las begonias cuentan con más de 1,500 especies diferentes, de multitud de tamaños y colores. También pueden florecer en cualquier época del año, algo que siempre se agradece. Ten en cuenta que necesitan espacio para extenderse.
Jardín vertical de interior
Si lo que quieres es un jardín vertical interior, deberás elegir otro tipo de plantas. La cinta es una planta que crece rápidamente, tanto que incluso puede invadir el espacio de otras que haya alrededor. Necesita un clima cálido, aunque preferiblemente su exposición directa al sol debe ser moderada, ya que si no, sus hojas se pueden quemar. El riego también debe ser moderado. Algunos llaman a esta planta ‘Lazo de amor’.
Otra buena opción es el Ficus Repens, conocido como higuera trepadora. Al igual que la cinta, no debe recibir luz directa del sol porque sus hojas se queman fácilmente, por lo que es mejor tenerla en semisombra. Para su crecimiento se necesita un ambiente húmedo. Los helechos son totalmente adaptables a cualquier jardín. Resisten la humedad y son capaces de crecer en la sombra. De hecho, son una de las plantas más utilizadas en los jardines verticales de interior. Existen más de 12,000 especies distintas de helechos.

El primer paso es decidir el tamaño de tu jardín vertical y en qué lugar se va a colocar dentro del hogar.
También se puede decorar con orquídeas, aunque no todas las especies son adecuadas. Opta por estas tres variedades: Dendrobium, Miltonia y Cymbidium. Sin embargo, ten en cuenta que es una planta que necesita muchos cuidados. No las riegues en exceso, pues se pueden pudrir. Si decides poner una orquídea, colócala en la parte más alta.
Por último, es muy recomendable la Cáscara de nuez, siempre que la coloques a la sombra. Sus hojas tienen forma de corazón, con colores verdes y rojizos. Si la riegas, hazlo una vez a la semana o dos como máximo. Florece durante el verano.
Cómo instalar nuestro jardín vertical
Una de las cosas más importantes a tener en cuenta desde un principio es saber el tamaño del jardín vertical y en qué lugar se va a colocar dentro del hogar. En función de esto, se elegirán las plantas que queramos poner, y si buscas una opción que le dé un toque especial, las 5 plantas trepadoras en flor para el jardín son ideales para añadir color y vida a tu espacio vertical.

Después, hay que saber el tipo de sustrato que usaremos. En el mercado existen ya instalaciones prefabricadas que cuentan con un espacio para el sustrato y el sistema de riego incluido. En el caso de que no esté incluido, tendrás que instalarlo después, ya que el sistema de riego es de extrema importancia.
A continuación, te dejamos un paso a paso para crear tu propio jardín vertical de manera sencilla y eficaz:
- Paso 1: Selecciona el lugar donde queremos instalarlo. Recuerda que tiene que ser luminoso.
- Paso 2: Coloca previamente, en la pared elegida, una tela de fieltro para evitar humedades.
- Paso 3: Instala ahora los paneles donde irán sujetas las macetas
- Paso 4: Realiza la selección de las plantas que quieres poner.
- Paso 5: Coloca las plantas cuidadosamente en la estructura.
- Paso 6: Comprueba el nivel de humedad de tus plantas y elige un sistema de riego que sea por goteo.
- Paso 7: Disfruta a cualquier hora de tu jardín vertical.
Además, para asegurarte de que tu jardín vertical se mantenga saludable y vibrante, a continuación te explicamos los cuidados esenciales que necesitarás seguir. El mantenimiento de un jardín vertical se basa fundamentalmente en tres pasos:
- El abono. Lo puedes encontrar sólido o líquido. En caso de duda consulta a un experto en jardinería para saber cuál es el más adecuado para tus plantas. También es fundamental renovar la tierra cada cierto tiempo, ya que las plantas pueden agotar los nutrientes que se encuentran en ella, y, por eso, es necesario renovarla.
- El riego, como ya hemos comentado, es un punto importantísimo para la vida de nuestro jardín vertical. El truco de esta enfermera para que las plantas no se queden sin agua cuando nos vamos de vacaciones es una excelente opción para asegurar que nuestras plantas se mantengan hidratadas incluso cuando no estamos en casa, evitando que sufran por falta de riego. Por eso
- La poda, necesaria para la estética del jardín.
Artículo publicado originalmente en el número 2.008 de la revista de papel cuyo autor original es Sonia Murillo.