Todos buscamos la manera de mantenernos saludables y vivir más tiempo, pero ¿y si la respuesta estuviera en un compuesto natural presente en muchos alimentos que consumimos a diario?
Puede que el nombre te suene a chino, pero se trata de los lignanos, un compuesto químico que puede ser una de las clave para lograr una vida más larga y saludable.
Antes de hablar de cómo puede ayudar a mantenernos más saludables, tenemos que saber qué son los lignanos y dónde los podemos encontrar.
Son un tipo de fitoquímico presente en plantas de forma natural como semillas de lino, sésamo, girasol y calabaza, así como en algunos granos enteros y verduras.

Los lignanos son conocidos por sus efectos beneficiosos en la salud, porque además de tener un alto poder antioxidante, se ha relacionado con la reducción del riesgo de enfermedades cardíacas, diabetes y algunos tipos de cáncer.
Este compuesto se encuentran en las plantas en forma de polisacáridos, que son difíciles de digerir para los humanos. Sin embargo, cuando son consumidos, las bacterias en el intestino humano los descomponen en compuestos más pequeños, que son absorbidos y pueden tener efectos beneficiosos en el cuerpo.
¿Cómo pueden los lignanos ayudar a vivir más tiempo y de manera saludable?
Estudios como este hablan de que las propiedades de algunos fitoquímicos de alimentos funcionales de origen vegetal pueden tener efectos positivos sobre la longevidad y la salud en general.
Los lignanos, como hemos comentado antes, tienen propiedades antioxidantes y antiinflamatorias, lo que significa que pueden reducir el estrés oxidativo y la inflamación en el cuerpo, dos factores importantes en el envejecimiento y las enfermedades relacionadas con la edad.
Además, se ha visto que pueden tener efectos protectores en el cerebro, mejorando la función cognitiva y reduciendo la inflamación en el cerebro, lo que puede ser beneficioso para prevenir enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer.

También se ha relacionado a los lignanos con efectos beneficiosos sobre la salud cardiovascular, reduciendo el riesgo de enfermedades cardíacas al disminuir los niveles de colesterol malo y mejorar la función arterial.
¿Cómo se pueden incorporar los lignanos a la dieta diaria?
Los lignanos se encuentran en una variedad de alimentos, especialmente en semillas de lino, sésamo, girasol y calabaza, así como en algunos granos enteros y verduras. Aquí te presentamos algunas formas sencillas de incorporar los lignanos a tu dieta diaria:
- Agrega semillas de lino, chía o sésamo a tu yogurt, ensalada, arroz...
- Come un puñado de nueces o almendras como un snack saludable.
- Agrega harina de linaza a tus recetas.
- Agrega calabaza cortada en cubos a sopas, guisos o puré.
Es importante recordar que los lignanos se encuentran en cantidades variables en diferentes alimentos, por lo que es recomendable consumir una variedad de alimentos ricos en este fitoquímico para obtener los máximos beneficios para la salud.
En resumen, los lignanos son unos compuestos naturales presentes en muchas platas y alimentos que pueden ayudar a vivir más tiempo y de manera saludable al reducir el estrés oxidativo y la inflamación en el cuerpo, mejorar la función cognitiva y proteger la salud cardiovascular.