En los anteriores capítulos de 4 estrellas, Rita parecía haber tenido un pequeño desliz horas antes de la boda que podría hacer que se cancelase el enlace. Todo indicaba que las familias Abalad y Lasierra no iban a terminar emparentando.
Mientras tanto, una salida de tono de Angelita con un cliente un tanto especial comprometió el resultado de su juicio. Y siguiendo con los juicios, la huida de Lucas parecía haber llegado a su fin.... ¡Menudo descanso le dejó a Pedro! Es que el hombre ya no daba más de sí.
Por si esto fuera poco, cuando las aguas parecían haberse calmado la boda volvía a verse amenazada por el secuestro de la novia. Mientras tanto, Lucas trató de convencer a su padre para hacer lo correcto: no podían seguir huyendo. A su vez, Miguel ayudó a Angelita a superar la visita del trabajador social.

En el capítulo de esta noche, en un arrebato de pasión con Diego, Marta descubre que el nuevo matrimonio de su madre comienza con el pie izquierdo. La pequeña de las Lasierra tiene en su poder una información que podría desestabilizar por completo el encale y es momento de decidir si sacarlo a la luz público o, como diría el sacerdote, guardar silencio para siempre. Además, Pedro y Lucas vuelven a tener un enfrentamiento después de que el joven decidiera visitar a su amigo ingresado en coma
Se suele decir que de una boda sale otra boda, pero, en este caso, es más probable que salga un divorcio. O, mejor dicho, más de uno, empezando por el de Diego y Paula, cuya relación ha llegado a un punto insostenible. Veremos si el romance entre Rita y Rafael corre con mejor suerte.
De Javier depende el futuro de Angelita. Si respalda ante el trabajador social la versión de la camarera del Chelsea y su hermano, podría reencontrarse con su hija. Luz y Ainhoa y Clara y Silvia tienen opiniones enfrentadas respecto a cómo proceder con el caso de Lucas. Ahora que todo el mundo sabe lo que hizo, sus jefas en el hotel Lasierra deben tomar una decisión.