Esta semana en Sueños de libertad, Jesús, consciente de las maquinaciones que urde junto a Andrés, descarga su furia sobre Begoña, mientras Mateo descubre que Gaspar está sacrificando su propio dinero para mantenerlo en su puesto. Este hecho lleva a Mateo a tomar una decisión crucial. Al mismo tiempo, Joaquín ofrece a Marta (Marta Belmonte) un espacio para la casa cuna, y los repetidos y enigmáticos encuentros entre Isidro y Andrés despiertan las sospechas de Jesús, que comienza a inquietarse.
Al día siguiente, sale a la luz que Jesús ha hecho desaparecer las pruebas del asesinato de Valentín, pero Andrés no está dispuesto a renunciar a su búsqueda de justicia. En otro ámbito, Miriam, la nueva secretaria, llega al pueblo: ¿Será capaz de integrarse sin tropiezos? Mientras tanto, Jesús deja atónito a don Pedro, lo que le obliga a reconsiderar su postura en las negociaciones sobre el balneario. Tasio, por su parte, recibe una noticia inesperada en la fábrica, mientras Jacinto continúa fortaleciendo su relación con Carmen, aunque los celos comienzan a apoderarse de él. Marta, sintiéndose culpable por sus ausencias, intenta reconciliarse con Fina.

Con Jesús controlando su herencia, Begoña no soporta la sensación de depender económicamente de él. Luz le sugiere un plan para liberarse de la sombra de De la Reina. Por otro lado, Isidro y Andrés comparten los últimos avances en la investigación sobre el asesinato de Valentín. Miriam, por su parte, desvela un inquietante descubrimiento: el último acto de Isabel antes de abandonar la empresa. Joaquín, preocupado, pide a Carmen que ayude a Miriam a resolver el asunto. Tasio, siempre curioso, se convierte en un improvisado detective al tratar de desvelar la orientación sexual de Jacinto.
Mientras tanto, Andrés y Begoña revelan un secreto devastador a los Merino, provocando una conmoción entre ellos al descubrir los verdaderos motivos tras la trágica muerte de Valentín. Digna y su familia, con sed de venganza, se preparan para actuar. Andrés y Marta exigen respuestas a Damián por su complicidad en el suceso, mientras Jesús confronta a Begoña por lo que ella y Andrés contaron a los Merino. Sin embargo, Andrés defiende a Begoña, mientras Fina (Alba Brunet) consuela a Marta, quien le confiesa los oscuros secretos de su familia. Damián, lleno de arrepentimiento, acude a Digna buscando el perdón que tanto anhela.