Cómo hacer cebolla caramelizada sin azúcar
Aunque es cierto que, tradicionalmente, la cebolla caramelizada se suele elaborar con azúcar, es posible que prefieras otra opción algo más saludable. Si es así, te enseñamos a hacer cebolla caramelizada sin azúcar, paso a paso.
En la cocina, la caramelización de las cebollas se consigue mediante un proceso conocido como reacción de Maillard. Maillard es el nombre del químico francés (cuyo primer nombre era Louis Camille), que accidentalmente descubrió el efecto de los azúcares sobre las proteínas originaba un pardeamiento e intensificación de los sabores. Dicho descubrimiento lo hizo público en el año 1911. Pero vayamos por partes.
La cebolla es un alimento bastante antiguo, cuyo sabor, en la cocina, puede llegar a ser bastante potente cuando está cruda, aunque tiende a volverse más suave a medida que se sigue con el proceso de cocción.
Durante todo el año, es posible disfrutar de todas sus cualidades nutricionales, además de disfrutar de todo su sabor y aroma. En lo que a las cebollas en sí se refiere, es cierto que mientras que algunas son muy redondas, otras son más alargadas. Y también pueden ser de color rojo o morado, amarillo y blanco.
La cebolla caramelizada es un verdadero placer para condimentar todo tipo de platos, ya que proporcionan un delicioso sabor dulce y picante a la vez. Básicamente consiste en cocer las cebollas lentamente hasta el punto de que lleguen al punto de caramelización, tras haberse dorado ligeramente. Aunque hay quien opta por cocinarlas el tiempo suficiente como para no necesitar azúcar, en la mayoría de las ocasiones lo más común es optar por añadir azúcar como uno de los ingredientes básicos.
Debemos tener en cuenta que las cebollas son dulces por naturaleza, y el caramelo proviene originalmente de la simple cocción del azúcar, ya que cuando cocinamos las cebollas lentamente, durante un período de tiempo prolongado, los azúcares naturalmente presentes en ellas se caramelizan, dando como resultado ese sabor tan particularmente intenso y sabroso.
Por este motivo, no es necesario añadir azúcar a las cebollas. A menos, claro está, que tengamos prisa y no podamos disponer del tiempo necesario como para conseguir dicho proceso de caramelización natural.
Receta de cebollas caramelizadas sin azúcar

Receta de cebollas caramelizadas sin azúcar
Ingredientes:
- Varias cebollas medianas o grandes
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal
Elaboración:
Comenzamos cortando la raíz de las cebollas hasta la punta. Para ello, cortamos con cuidado los extremos del tallo de las cebollas y las raíces del extremo de la raíz. Ahora las colocamos con el lado cortado hacia abajo en nuestra tabla de cortar habitual. Las cortamos por la mitad, siempre a través del extremo de la raíz, y pelamos las cáscaras de las cebollas.
Las colocamos con el lado cortado hacia abajo, y hacemos cortes en ángulo en cada una de las cebollas, apuntando siempre hacia el centro, cortando casi todo el camino (lo ideal es hacer cortes con un grosor similar).
Procedemos ahora a calentar el aceite de oliva. Utilizamos una sartén ancha, de fondo grueso, lo que ayudará a que la sartén entre en contacto con todas las cebollas. Cubrimos el fondo de la sartén con aceite de oliva, y calentamos a fuego medio alto hasta que el aceite empiece a brillar. Añadimos las rodajas de cebolla con cuidado, y revolvemos para cubrirlas bien con el aceite. Es fundamental extenderlas uniformemente a lo largo de la sartén. Luego, dejamos cocinar, removiendo de forma ocasional.
Eso sí, es conveniente controlar la cocción por si es necesario bajar la intensidad del fuego, lo que evitará que las cebollas se sequen o se quemen. Para evitar que se sequen, puedes añadir un poco de agua a la sartén (con cuidado de no quemarte).
Pasados 10 minutos de cocción, espolvoreamos un poco de sal por encima. Dejamos cocinar entre 30 a 60 minutos más, removiendo cada pocos minutos. Tan pronto como las cebollas empiecen a pegarse a la sartén, las dejamos que se peguen un poco más y se doren, pero debemos revolverlas bien antes de que se quemen.
A medida que las cebollas se vayan cocinando, es posible que debamos raspar la sartén cada vez más asiduamente. Así, es necesario seguir cocinando y removiendo, hasta que las cebollas adquieran un color dorado e intenso.
Si no deseas consumirlas o usarlas en el momento, puedes almacenarlas en la nevera durante varios días en un recipiente hermético.
¿Cómo usar la cebolla caramelizada en nuestros platos?
Son tan deliciosamente dulces y picantes que las opciones para usar nuestra cebolla caramelizada son infinitas. Por ejemplo, podemos usarlas en platos de cuchara, como guisos o sopas de cebolla.
Pero también son ideales en sándwiches y bocadillos, pizzas caseras, hamburguesas (de carne o veganas), sobre todo tipo de papas (al horno, papas fritas o puré), sobre arroz, pasta o huevos revueltos.