¿No adelgazas? Identifica tus fallos

‘Por más dietas que hago no adelgazo un gramo’; ‘recupero todos los kilos’. ¿Lo has dicho alguna vez? Para perder peso, la primera norma es comer bien.

‘Por más dietas que hago no adelgazo un gramo’; ‘recupero todos los kilos’. ¿Lo has dicho alguna vez? Para perder peso, la primera norma es comer bien. Descubre los errores más comunes y las pautas sanas que no pesan en la báscula.

Seguro que lo has oído mil veces: lo importante para perder peso es hacerlo de forma saludable. Y es cierto: “Cuando nos ponemos a régimen, hemos de procurar a nuestro organismo los nutrientes imprescindibles. Si no, no podrá cumplir con esa tarea. Es como intentar que un coche funcione sin echarle combustible”, dice la  doctora María Teresa Barahona, de Madrid.  Y una de sus consecuencias es el temido efecto yoyó y que cada vez te cueste más adelgazar. ¿Cuáles son los malos hábitos que sólo harán que te frustres y no pierdas peso? Toma nota: tomar solo alimentos ‘light’  Ya sean bajos en grasa o azúcar, has de saber que los productos light no siempre son bajos en calorías. “Simplemente son alimentos cuya aportación calórica es inferior respecto al nutriente natural”, agrega la doctora. No te excedas con ellos, porque puede ocurrirte que en lugar de perder peso (¡para colmo!) ganes algún que otro kilo.

Saltarse el desayuno

Si lo hacemos, a media mañana estaremos a medio gas, bajará nuestro rendimiento y nos costará concentrarnos. Además, llegaremos a la comida con mucha hambre y comeremos más y -lo peor-cualquier cosa. No te lo saltes: toma leche vegetal o desnatada con cereales integrales ricos en fibra (te saciará y te sentirás menos hinchada).

¿Crees que así te ahorras calorías? Solo se lo pones más difícil a tu organismo: cuando suprimimos cualquier comida, en nuestro cuerpo se produce una bajada de azúcar en sangre (hipoglucemia) que dispara el hambre y la necesidad de dulce (el cuerpo ‘quiere solucionar’ esa situación y lo pide). No te saltes comidas, porque entonces obligas a tu cuerpo a funcionar con muy poco combustible y, entonces, no le queda más remedio que volverse ahorrador. ¿El resultado? Justo lo que no quieres: gasta menos calorías y acumula grasa.

Fíjate: más de la mitad de los españoles cree que engorda. Y no. Solo lo hace si lo acompañas con grasa (mantequilla, embutidos, queso...). Toma 30 g al día de integral: te saciará horas y no te faltará energía (es un hidrato complejo que se asimila lentamente).

¿Comes únicamente a base de ‘barritas’? Hacerlo de vez en cuando está bien y puede ayudarte, pero procura que siempre lo supervise un especialista para compensar las otras comidas. Porque ojo, si te habitúas a comer así, luego tal vez te cueste preparar platos sanos para mantener el peso óptimo.

Recomendamos en