La actriz Demet Özdemir llegó por primera vez a las pantallas españolas con el éxito Erkençi Kus. Su personaje, el de Sanem, quedó grabado en el recuerdo de muchos espectadores y hoy en día, sigue siendo uno de sus papeles más queridos. No obstante, Demet Özdemir es mucho más que esta ficción y lo ha demostrado a lo largo de los años, trabajándose una carrera en impoluta y caracterizada por la versatilidad de la actriz. Una de sus mejores producciones es de época y, aunque Demet no tiene aquí un papel protagonista, logró brillar con su actuación. Se trata de Kurt Seyit ve Sura.
Ambientada entre los años 1915 y 1923, cuenta la historia de amor del teniente Kurt Seyit Eminof (Kivanç Tatlitug) y de Alexandra Verjenskaya, conocida por todos como Sura (Farah Zeynep Abdullah) y de las idas, venidas y distintas situaciones que tuvieron que atravesar por su amor y por los momentos políticos e históricos en los que les tocó vivir. La novela, que cuenta con dos temporada, data de 2014 y es una verdadera joya no sólo por tocar un tema tan interesante como complejo y polémico, sino por su ambiciosa producción, cuyas escenografías viajan a través de los paisajes de San Petersburgo, la península de Crimea y Estambul. Está basada en un bestseller del año 1992 —que aún no ha sido traducido al español— de la escritora turca Nermin Bezmen, nieta del verdadero soldado Seyit Eminof.
Kurt Seyit Eminof es un destacado teniente del Ejército del zar Nicolás II, el último de la dinastía Romanov. Su lealtad hacia Rusia se ve inalterada incluso pese a haber nacido en la ciudad de Alushta, en la península de Crimea, y ser parte de una familia tártara de origen turco que practica el islam y es profundamente tradicional. No es el caso de uno de sus amigos militares, que en medio de la revolución se une a los bolcheviques —aunque más tarde se descubra que fue más por oportunismo que por compartir las ideas comunistas.

En uno de sus regresos desde el frente, durante la Primera Guerra Mundial, Seyit conoce a la bella Alexandra Verjenskaya, o Sura, la menor de las hijas de una familia noble de la ciudad de Kislovodsk, en el sur de Rusia. Sura ha viajado a San Petersburgo junto a su padre y su hermana para su presentación formal en sociedad, siguiendo lo que dictan las tradiciones nobles de entonces. Una mirada alcanza para que Sura y Seyit se enamoren perdidamente durante un distinguido baile de la nobleza rusa, que, vestida con preciosas joyas y telas exóticas, disfruta de maravillosos banquetes en los majestuosos palacios de la época. Aunque los disturbios y saqueos en algunas ciudades ya son tema de conversación entre los nobles, no alcanzan todavía a perturbar esas escenas salidas de cuentos de hadas y propias de las clases privilegiadas rusas.