Feng Shui: energía positiva para tu casa
La forma en que se ordena y resuelve el recibidor refleja nuestra empatía, nuestra actitud hacia los demás y hacia nosotros mismos. El Universo nos da lo que damos. Aplica la filosofía Feng Shui a tu entrada.
La forma en que se ordena y resuelve el recibidor refleja nuestra empatía, nuestra actitud hacia los demás y hacia nosotros mismos. El Universo nos da lo que damos.
El recibidor de casa marca la transición entre la calle y nuestro hogar (afuera/adentro). La calle es un espacio yang, lleno de movimiento, y nuestra casa, un lugar yin, privado, protegido, personal.
Si al acceder a tu hogar te sientes lleno de amor, paz interior y pensamientos positivos, ninguna energía negativa logrará penetrar en él y solamente entrarán energías positvas. Pero, si al llegar a tu casa, te invaden sentimientos de disgusto, tristeza o irritabilidad, le estarás abriendo la puerta a las energías negativas para que se instalen en ella.
Para evitarlo, elige el color que te guste: el melocotón o salmón se recomiendan por su calidez. También el amarillo, si tiene poca luz. Pero, no te limites por esto, selecciona el color que va contigo, que te aporta armonía. A la derecha de la puerta estaría bien que ubicaras un lugar donde dejar lo que llevas (bol, llaves, cartera...). Al apoyar las llaves, si ves una foto bonita de tu familia, en la que estáis felices, te invadirá una sensación de paz que te ayudará a dejar fuera todos los problemas imposibles de resolver por el momento. También coloca en el recibidor un cuadro, fotografía u objeto (plantas, flores...) que te dé la bienvenida a tu hogar. Las facturas pendientes ordenadas; carpetas o elementos de trabajo; y fotografías de antepasados ya fallecidos.
Si vives en una casa sin recibidor, reproduce estos gestos en la zona principal. Apreciarás el cambio.