¿Sabes usar correctamente el acondicionador?

Para mantener el pelo limpio con un aspecto bonito y vivo es necesario tener en cuenta algunos cuidados. Usar los productos correctos y de calidad es esencial para mantener el pelo sano.

Pasos para usar correctamente el acondicionador

- Moja bien el pelo antes de echarte el champú, aplica el producto en las manos y llévalas al cuero cabelludo masajeándolo bien sin usar las uñas.

- Pasa una segunda vez el champú (en el caso de que no te hayas lavado el pelo el día anterior) y enjuágalo con agua corriente.

- Con una toalla, seca el exceso de agua y en seguida aplica el acondicionador de medios a puntas.

- Masajea bien el pelo y deja el acondicionador descansar durante algunos minutos (generalmente en la información del producto aparece el tiempo correcto).

- Enjuaga el pelo hasta que todo el acondicionador haya desaparecido, ya que si el producto se queda en el pelo, este se quedará opaco, pesado y seco.

El acondicionador forma una película protectora alrededor del pelo, disminuyendo la deshidratación de este. Estos productos contienen proteínas que ayudan a reducir el impacto de lesiones causadas por la polución y el secador. Con esto, el pelo se queda más fuerte y resistente. Los activos que contienen estos productos devuelven el brillo, el movimiento y disminuyen la elasticidad estática del pelo.

El acondicionador es el responsable de la suavidad de nuestro pelo, dejándolo más fácil de peinar, más brillante y menos propenso a la rotura y a las puntas abiertas. El acondicionador cierra las escamas del pelo (abiertas por el champú) y con esto evita que el pelo pierda sus nutrientes.

Las personas que piensan que el acondicionador solo es necesario para aquellas que tienen el cabello seco, se engañan. Todos los cabellos, menos los grasos necesitan recibir este producto después del champú.

El acondicionador aplicado en el cuero cabelludo puede provocar o aumentar la grasa capilar, además de causar caspa (un problema que aumenta en invierno por el uso del agua caliente).

El acondicionador debe ser usado después del champú, solo en el largo del cabello, es necesario dejar que actúe aproximadamente durante unos tres minutos y finalmente hay que enjuagarlo bien. Nunca se debe dejar el acondicionador en el pelo, ya que quedará muy grasiento y con tendencia a caspa, además de que el pelo puede quedarse pesado y opaco.

Por tener mayor concentración de activos, la mascarilla de tratamiento tiene un poder de hidratación mayor que los acondicionadores. Esta debe ser usada de acuerdo con las necesidades específicas del pelo, para nutrir, hidratar, dar suavidad, retener el color, o controlar la grasa y el volumen. Su uso debe equivaler a una o dos veces por semana, dependiendo del nivel de desgaste del pelo.

- Cabellos secos: que no se libran del uso de la plancha o tenacilla o que poseen daños muy visuales a primera vista, deben apostar por productos con una dosis extra de hidratante que tenga una consistencia más espesa.

- Cabellos finos y lisos: necesitan productos que aporten hidratación (sin llegar a dejar el pelo pesado y graso). Esos tipos de acondicionador contienen sustancias que ayudan a dar volumen al pelo.

- Cabellos normales: en el caso de que el pelo parezca estar sano, lleno de brillo y que normalmente usa planchas o tenacillas, es recomendable dar preferencias a los acondicionadores, que contienen lo esencial para mantener la calidad del cabello sin dejarlo pesado o graso.

- Cabellos dañados, teñidos, con alisado o encrespados: deberían optar por acondicionadores específicos para ello. Su uso diario ayuda a devolver la salud del cabello.

Importante: La mascarilla debe ser utilizada para hidrataciones y no para el día a día como un desenredante. Para eso existen los acondicionadores, que son el complemento perfecto de los champús en tu rutina diaria.

Por Valeria Costa de Aquarela Peluqueros.