6 restaurantes de Madrid en los que disfrutar del potaje y otros grandes platos de Semana Santa
Aunque ahora son minoría cuando antes eran amplia mayoría, todavía existen cocinas excelentes en las que se bordan el potaje de vigilia o las torrijas.
Inmersos en plena Cuaresma, la tradición culinaria española sigue su habitual ciclo anual intentando sobrevivir a los cambios culturales evidentes que vive la sociedad. El clima, el momento del año que marca el calendario o la región en la que te encuentres son factores clave para entender las bases de nuestra cocina, y por mucho que se pueda notar el impacto de la globalización, los tres se mantienen inamovibles como argumentos de peso. Pero hay otro factor tan importante como estos en el recetario tradicional, el religioso, que sí que se tambalea un poquito más. Es una realidad que ya no hay tanto consenso en torno a adaptar la dieta en base a las creencias religiosas -no tomar carne los viernes de Cuaresma ni el miércoles de ceniza-, lo que hace que se ponga en duda en cierto modo la hegemonía de los grandes platos de Semana Santa cuando esta llega a nuestras vidas cada año.
La prueba es que ya no es tan fácil encontrar restaurantes que preparen menús especiales en estas fechas o que tengan en carta algunas recetas vinculadas a esta época del año. Afortunadamente, todavía los hay, y de calidad, y es que es difícil resistirse a los encantos de un buen potaje de vigilia, de los buñuelos o de unas torrijas -a la sopa de ajo le cuesta más conquistar a tantos paladares…-. ¿Se te hace la boca agua pensando en ellos, verdad? Pues aquí tienes cinco restaurantes donde disfrutar de estos y otros grandes platos adaptadas a las peculiaridades culinarias de la Semana Santa.
Francisca
Ya hemos perdido la cuenta de los años que lleva ofreciendo a sus clientes esta encantadora casa de comidas situada a dos pasos de la catedral de La Almudena y de la plaza de Lavapiés, un lugar magnífico para hacer parada en plena jornada de ocio por el centro de Madrid en Semana Santa, probablemente la mejor época del año para visitar la ciudad. La Francisca ofrece un menú degustación con una relación calidad-precio excelente en la que el bacalao es el absoluto protagonista. Toda una referencia en estas fechas.
Bailén, 14.

Potaje de Hevia
Más de medio siglo de su nacimiento como bar en plena calle Serrano, Hevia ha evolucionado hasta el magnífico restaurante con barra que es hoy, sin perder ni un ápice de su esencia familiar ni quitar la vista de la tradición. Prueba de ello es que es de los pocos restaurantes de Madrid que durante los viernes de Cuaresma sirve su receta del potaje de vigilia.
Serrano, 118.
El restaurante anexo al hotel Miguel Ángel de Madrid, liderado por Manuel Prats, el chef ejecutivo desde hace tres décadas de este tradicional hotel de lujo, es un elegante rincón en el que disfrutar de una comida sobresaliente. Son habituales sus menús especiales a lo largo del año, entre los cuales se ofrece habitualmente uno especial de Semana Santa durante los días que esta dura. Sopa de ajo, potaje y torrija no faltaron en la edición del 2019 así que estamos deseando poder repetir la experiencia en este 2020.
Miguel Ángel, 29.
Es uno de nuestros favoritos de Madrid, uno de esos restaurantes en los que sabes que lo que va a suceder alrededor de la mesa lo disfrutarás tanto que nada más salir estarás pensando en cuándo podrás regresar. Además, en el caso concreto que nos ocupa es una opción fantástica porque en su carta tiene los dos grandes platos de la Semana Santa, aunque ambos tengan el toque de la casa. El cocido de garbanzos guisados, lomo de bacalao y espinacas es una maravilla que conecta de lleno con el potaje de vigilia y el pan perdido con helado de caramelo tiene la misma esencia (adictiva) de la torrija. De hecho, en su carta se aclara que es “tipo torrija”, por si algún comensal lo dudaba.
Jorge Juan, 8.
En esta taberna situada en la mítica Cava Baja madrileña, al lado de la Plaza Mayor, tienes la torrija clásica de leche servida con helado de Fondillón, un vino Denominación de Origen Alicante, todo el año en carta. Además, su oferta está repleta de platos tradicionales y dejan un espacio reservado a los productos de mercado y a las recetas de temporada, de ahí que la Semana Santa sea un momento excelente para hacer una parada técnica en él.
Cava Alta, 17
Esta casa de comidas ofrece todo el repertorio de platos clásicos de la cocina tradicional española en un ambiente agradable y contemporáneo, puesto que arrancó su trayectoria el año pasado. Precios muy ajustados de platos como el potaje de vigilia, que forma parte de su atractiva oferta permanentemente. Para disfrutar de una buena receta da igual lo que diga el calendario.
Paseo de Eduardo Dato, 8.