Todas estamos seguras de que la perfección no existe, hasta que aparece Can Yaman sin camiseta y nos confirma que las excepciones a las reglas sí que existen y que él es una de ellas. El galán turco es de esos actores que siempre busca mejorar. Cuando no está viajando con la gira de su fundación, se centra en nuevos proyectos poniendo todo de su parte para crear obras de arte.
«Hice un gran sacrificio físico en el rodaje de El Turco. Justo después, me enfrenté a un desafío totalmente distinto con Viola 2 y es hora de volver a poner otra enorme carga sobre mis hombros con Sandokan», explicaba el histrión compartiendo en sus redes una foto de su musculada espalda mientras prepara el vestuario para una escena de Sandokan.
y es que, interpretar al protagonista de las novelas de aventuras del italiano Emilio Salgari le está pasando factura a Yaman. El muchacho ha tenido que perder más de 10 kilos en solo un mes para poder meterse en la piel de "el tigre de Malasia".
Las respuestas a su cambio físico no han tardado en aparecer y su legión e fans se ha mostrado muy preoupada al verle por primera vez, sin ese par de pectorales siempre listos para rallar queso. Pero que no cunda el pánico porque el protagonista de Pájaro soñador sigue fuerte como un roble y feliz de enfrentarse a un nuevo reto.
«Es una fase especialmente intensa, me he quitado muchos placeres de la vida, tengo que entrenar 2 o 3 veces al día y hacer ayuno intermitente, manteniendo las calorías muy bajas (...) No hay que preocuparse: a pesar de estar agotado, estoy perfectamente sano, rejuvenecido y ligero», ha explicado a través de su cuenta de Instagram.
Apoyo y comprensión
Estar bueno es una forma de vida y es la de Can Yaman. El actor, que ha pasado de 95 a 85 kilos en menos de un mes, asegura que se somete periódicamente a controles médicos y que la transformación continua forma parte de su carrera.
«Al final, esto es lo que hacen los actores: se transforman con dedicación cuando es necesario y moldean sus cuerpos para nuevos papeles. En resumen, seguiré así hasta que lleguemos al Sandokan que queremos», ha escrito en Instagram, dejando claro que su intención es perder aun más peso y pidiendo a sus fanáticas que le comprendan, le acepten y le sigan queriendo: «Les pido que me sigan apoyando como siempre lo han hecho».
Descontectar para volver a conectar
A Yaman le encanta eso de salir de Málaga para meterse en Malagón. Protagonista de éxitos como Dolunay o El hombre equivocado, el intérprete acaba de terminar el rodaje de la segunda temporada de Violeta como el mar 2 y ya se ha puesto manos a la obra con Sandokan. Pero antes, ha decidido tomarse unos días de descanso para comer sin pensar en las calorías, disfrutar de un buen libro o crear nuevos recuerdos con sus seres queridos.
«Decidí regresar a mi ciudad natal para poder pasar un rato con mis padres, familia y otras personas a las que quiero. Necesitaba descansar un poco y desconectar. También quería disfrutar de la cocina turca, la echaba mucho de menos», confesaba Can, quien pasará seis meses grabando Sandokan.
