El amor es uno de los sentimientos más intensos del ser humano. Nos encantan querer y que nos quieran en muchos ámbitos de la vida. Por supuesto, el amor hacia nuestra familia de sangre es para muchas personas esencial: nuestros padres, abuelos, nietos, hijos, sobrinos... los vínculos familiares nos refuerzan mucho. También para muchos el amor hacia los amigos es igual o incluso mayor que hacia la familia, pues suelen ser personas con las que compartimos gustos o aficiones. Y luego está el amor romántico, el más pasional de todos.
El objetivo de muchas personas en la vida es, además de otras cosas, enamorarse. Ya sea para formar una familia o para vivir en pareja, muchos quieren crear este vínculo tan fuerte para siempre (o, por lo menos, intentar que lo sea). Nosotros ya te hemos hablado de las seis señales clave para saber si le gustas a una persona en el caso de que la estés buscando, y en esta ocasión os dejamos las fases del enamoramiento en una pareja según los psicólogos. Estos expertos nos han explicado cuáles son en concreto, cómo progresa la relación en cada una de ellas y cómo superarlo si no se van superando estas etapas.
Cuáles son las fases del amor en una pareja

Silvia Cintrano, psicóloga especialista en Terapia de Pareja en el Instituto Centta, asegura que "aunque las fases del amor dependen mucho del autor al que prestemos atención, hay tres fases comunes en todas ellas". Y prosigue diciendo que el resto de fases son el desarrollo de matices que se engloban dentro de las siguientes, que además explica con detalle:
1. Enamoramiento
La fase más pasional, donde la atracción está en su punto álgido. Predomina el deseo sexual y la atracción física, por lo que es habitual una mayor frecuencia de encuentros sexuales. A nivel psicológico, como solía decir un profesor mío, el enamoramiento es el delirio mejor aceptado socialmente, ya que en esa fase uno 'se ciega', aparece la admiración, el interés desmesurado por el otro y una gran dificultad para percibir los defectos, engrandeciendo las cualidades. Es decir, lo que uno ve cuando está enamorado, únicamente lo ve esa persona (de ahí el delirio). Existe una gran necesidad de priorizar al otro por seguir indagando en el vínculo, casi de una manera fusional.
2. Conocimiento y aceptación
La relación empieza a ser menos fusional y da paso a una relación más íntima, más realista, donde el vínculo y la intimidad son más profundos y el conocimiento sobre el otro mayor. Esto significa que se empieza a desarrollar un amor más inteligente, en el que no se siente como que se está en una nube o un sueño, y el delirio comienza a desaparecer. Conocer al otro significa ser consciente de las virtudes, pero también de los defectos y las limitaciones, y da paso a un entendimiento de las necesidades individuales donde comenzar a trabajar en equipo para que la relación cubra las necesidades de ambos.
3. Consolidación
El vínculo emocional llega a ser mucho más sólido y seguro, manteniéndose una estabilidad en el tiempo. Las bases de la relación se han establecido y conseguido un punto de equilibro (aunque la vida siempre pone en el camino nuevos retos a los que seguir enfrentándose como pareja). Es un momento de tranquilidad con respecto a la relación donde disfrutar de todo el cuidado previo.
Cómo progresa el enamoramiento en una relación

Por su parte, la experta Pilar Conde, la directora técnica de Clínicas Origen de Psicología y Psiquiatría, afirma que "en un primer momento, desde un punto de vista psicológico se ve todo positivo, maravilloso, idealizado, no se es capaz de observar otros rasgos, o incluso se pueden ver como positivos. Esto se suma al combo experiencial que se siente, lo que genera un alto nivel de bienestar en la persona, atribuido a la relación y al otro".
Eso sí, añade que "cuando pasa el tiempo, empezamos a ser más racionales y empezamos el "duelo" de esa idealización, lo que deriva en emociones como frustración, desengaño, pero son saludables dado que es necesario observar la totalidad de la persona, de una manera real, y así desde ahí aceptar y comprometerse con la relación de una manera saludable, donde ambos podrán ser ellos mismos, respetándose de manera recíproca y creciendo de manera conjunta".
¿Cómo se supera si no pasamos a la siguiente fase del romance en una relación?

"Podría parecer que las rupturas en las fases iniciales son mucho más difíciles de superar que en las fases más avanzadas de la relación: suelen ser más “violentas” emocionalmente, muy intensas, ya que la persona está en un nivel muy elevado emocionalmente y la caída se siente imparable", comienza diciendo la psicóloga Silvia Cintrano. Porque sí, al principio muchos sientan esa sensación por lo intento que se vive todo. Sin embargo, a nivel psicológico no ocurre esto.
Como explica esta misma experta, "cuando existe un estímulo novedoso, uno reacciona de forma más potente que con uno ya conocido, es decir, excita (hablando de nivel de activación) de forma significativa a diferencia de un estímulo ya conocido, que no genera tanta reacción. Sin embargo, cuando desaparece el novedoso, el bajón desde nuestra línea base no es tan intenso ni se mantiene tanto en el tiempo. Con uno conocido, con el que existe un vínculo mayor, la pérdida es mucho mayor, por lo que sume a la persona en una pena y un duelo mucho más profundo".