Una vez que se recibe el diagnóstico de pérdida auditiva, el siguiente paso es escoger los audífonos que mejor respondan a las necesidades de cada persona. Para ello, se suele tener en cuenta el estilo de vida, las preferencias del diseño, la funcionalidad y el presupuesto.
En este sentido, la ayuda del audioprotesista será fundamental para ajustar la decisión al resultado del estudio audiológico, así como a escoger entre los mejores audífonos. José luis blanco. Jefe de Audiología de Oticon, nos habla de los dos tipos de audífonos que existen en el mercado.

Audífonos según los tipos y grados de pérdida auditiva
- Retroauriculares. Son los audífonos más comunes. Se adaptan a la mayoría de tipos y grados de pérdida auditiva. Tienen botones más grandes y fáciles de usar, proporcionan discreción y una buena conectividad. Se colocan detrás del oído y transmiten el sonido a través de un cable o tubo fino que recorre la parte superior del oído y entra en el conducto auditivo. Los actuales son muy pequeños, ligeros y discretos, hasta el punto de pasar desapercibidos.
- Intrauriculares. Se emplean en pérdidas auditivas leves a moderadamente severas. Se hacen a medida para adaptarse a los oídos. Se ajustan de forma perfecta a los conductos auditivos, ya que se fabrican a medida. Los más pequeños pueden quedar alojados en el conducto auditivo y ser casi invisibles y todos se fabrican con colores que imitan el tono de la piel.