En el capítulo de esta noche de Secretos de familia, Okan encierra a todas las personas que estaban en el bufete Tilmen en un despacho. Después, se comunica con Ilgaz a través del teléfono de Ceylin. El conductor de ambulancia confiesa que tiene un hijo llamado Cem, que padece una enfermedad cardíaca: «Necesita un trasplante urgente o morirá. Por eso he ido matando a todas las personas que eran descubrí que eran donantes de órganos, como Tülin. Pero ninguno de esos malditos corazones era compatible».
Ilgaz le pregunta a Okan que es lo que quiere para liberar a los rehenes del bufete. «Tiene cuatro horas para encontrar un corazón compatible con el de mi hijo y realizar el trasplante o mataré a todos los que están aquí dentro conmigo», sentencia el hombre. Gracias a Yekta, Ilgaz consigue sacar a Mercan por una de las ventadas del despacho de abogados, pero no logra hacer lo mismo con el resto de secuestrados.
Por casualidades del destino, un joven de 23 años, del mismo grupo sanguíneo y la misma complexión que Cem, fallece en un accidente. El joven no era donante de órganos. Sin embargo, Metin habla con sus padres y estos aceptan que el corazón de su hijo sea para Cem. «Gracias a esta acción vais a salvar muchas vidas», le dice el policía a los afligidos progenitores.

Mientras tanto, Okan descubre que Yekta ha propiciado la fuga de Mercan del bufete y, enfadado, le dispara a bocajarro. En ese momento, el conductor de la ambulancia recibe una llamada de su mujer, quien le dice que, en unos minutos, comenzará el trasplante de corazón de su hijo: «Lo que has hecho ha funcionado».
Por su parte, Ceylin y Laçin tratan de contener la hemorragia de Yekta. Las heridas en el pecho del abogado son muy graves y está perdiendo mucha sangre. Con las últimas fuerzas que le quedan, le pide perdón a Ceylin. Esta, por supuesto, acepta sus disculpas y con la voz rota, le pide que no se muera: «Por favor, no me dejes sola. Eres lo más parecido a un padre que me queda»