Adicción a los videojuegos, ¿cómo saber si estamos ante un problema?

La tecnología juega un papel muy importante en nuestras vidas ya que, aún sin quererlo, la utilizamos constantemente en nuestro día a día. Sin embargo, tenemos que tener en cuenta que se puede convertirse en un perjuicio, sobre todo para nuestros hijos.

Y es que a nuestros pequeños les encanta enredar con los objetos tecnológicos que tenemos en casa y aprender a utilizarlos a través de diferentes juegos. No obstante, debemos tener cuidado, porque la rutina se puede llegar a convertir en adicción, sobre todo con los videojuegos.

Como bien afirma la doctora Concepción Ruipérez, “es cierto que las consolas pueden convertirse en una forma de entrenamiento para la mente, pero su uso excesivo puede conducir a graves problemas de salud que son fáciles de prevenir”.

Uno de los principales indicios para diagnosticar la adicción se manifiesta en el hecho de que los niños prefieran  quedarse en casa en vez de salir a la calle a jugar con sus amigos o a dar una vuelta en bicicleta por la ciudad. El sedentarismo puede hacer que los niños puedan desarrollar más fácilmente obesidad o enfermedades de corazón, lo que supone un problema de gran gravedad.

Por otra parte, la adicción también se manifiesta en el insomnio y en distintas alteraciones del sueño, que pueden hacer que los pequeños no rindan correctamente en la escuela y estén más irritados y estresados durante el día. De hecho, como afirma la doctora Ruipérez, “hay algunos casos en los que los niños han llegado a perder la dimensión de la realidad y del tiempo como consecuencia de tener los mandos en sus manos más de lo debido”.

Si nuestros hijos tienen esta tendencia, debemos tener en cuenta que podría estar provocada por el uso excesivo de los videojuegos. Si limitamos el tiempo que pasan frente a la consola e incentivamos otro tipo de actividades al aire libre en familia, podemos hacer que desarrollen todo su potencial y estén más alegres y contentos.