No estamos seguras de que J.K Rowling esperara todo el éxito que después tuvo con la saga Harry Potter, pero desde luego que lo ha tenido. El niño mago más famoso de la ficción cuenta con millones de fans y todo un universo a su alrededor que incluso alcanza al ámbito culinario. Sí, sí, porque resulta que hay tantas recetas de Harry Potter que podría escribirse un libro al respecto (de hecho, ya los hay).
Pastelillos de calabaza, ranas de chocolate, las Bertie Botts beans... El mundo mágico se caracteriza por contar con platillos que, en muchos casos, están inspirados en la cocina británica más tradicional. Encontramos así dulces con mucha mantequilla, algún que otro guiso, tartas y empanadas contundentes... Porque desde luego, las recetas producto de la imaginación de J.K Rowling, tienen mucho que ver con la cocina de siempre y no se caracterizan precisamente por la estética cuidada o por su relación con la alta cocina.
En cuanto a las bebidas, una de las más sonadas es sin duda la cerveza de mantequilla. Esta es un imprescindible en el mundillo de Hogwarts y es relativamente fácil de recrear en la vida real, aunque sí o sí debes beberla caliente. Pero si quieres ir más allá, continúa leyendo. Estas son las recetas de Harry Potter que lo petan en Instagram.
Sangre de unicornio
Sí, queridas. Esta 'sangre de unicornio' sabe a frutas y perlitas comestibles. Al contrario de lo que ocurre con la sangre de este animal fantástico en la saga de Potter (te mantiene con vida pase lo que pasa pero a la vez te maldice), esta está deliciosa y puede encantar a los más pequeños de la casa.
Pastas de té de El Grim
Las verdaderas fans del mundo mágico conocerán de sobra al Grim: un espectro con aspecto de perro gigante que puede llegar a ser el peor de los presagios. La profesora Trelawney lo ve en los posos de té de la taza de Harry durante la clase de adivinación... Y ahora puedes convertirlos en pastas de Earl Grey. ¿Has visto qué pinta?
Estofado de lentejas y champiñones
Este plato del que el señor Weasley es tan fan tiene un ingrediente secreto: la cerveza. Puedes recrearlo con tus verduras favoritas, pero quedará genial si además de las lentejas y los champiñones agregas cebollita, zanahoria y una ramita de tomillo. También puedes acompañarlo de puré de patata.
Goulash
¿Sabes lo que es el Yule Ball? Se trata nada más y nada menos que de el baile formal que se celebra tradicionalmente con motivo del torneo de los tres magos. Justo antes de que se celebre, Harry cena un plato de goulash, una sopa tradicional húngara que se elebora con carne, verduras, pimentón y otras especias.
Ranitas de chocolate
Las ranas de chocolate son un dulce básico en el mundo mágico. Son ranitas de chocolate que venden en cajas pentagonales de color azul y dorado, y que además de la chocolatina esconden en su interior un cromo de algún mago o bruja célebre. Y no solo las venden en el Hogwarts Express, ¡también puedes hacerlas tú en casa!
Pasteles de roca
Sin duda, uno de los must have de Hagrid durante toda la saga. El guardabosques de Hogwarts es todo un profesional preparando estos pastelillos que, desgraciadamente (y en la ficción) son demasiado duros para la mayoría. Eso sí, tú puedes adaptarlos y hacerlos aptos para consumo 'humano'. ¡Ideales si te pierden las galletas con un toque crunchy!
